El Pequeño Osito De Zed |#3|

10-Feliz cumpleaños

—Shh, van a despertarlo.

—Sólo hablale para comer pastel ya.

—Espera a que desayunemos, princesa.

Sean gimio al ser movido por unas manos fuertes, no quería abrir los ojos, no quería levantarse, no quería nada. Sólo su comoda y dulce cama.

—¡Despierta, puto flojo!—Sean brinco desperando al instante de aquel grito.

Zayn y Liam miraron mal a la niña entre ambos, el castañito cayo en cuenta del pastel de chocolate en las manos de su papá Zayn y sonrió adormilado.

—Feliz cumpleaños, amor—le felicito, se acerco para besar la cabeza llena de rizos—Es hora de levantarse.

El pequeño quejoso tratando de volver a dormir y siendo interrumpido por su papá Liam quien le tomo alzandolo fácilmente de la cama.

Llevo al niño hacia el baño y lo metió con todo y ropa a la regadera encendida. Sean chillo tratando de escapar, pero la mano en su cabeza se lo impedía y terminó empapado.

—Según yo, así no se tratan a los cumpleañores—reprochó saliendo una vez que el abogado le dejo.

Liam sonrió a su hijo de mejillas sonrojadas. Ayudo a su retoño para quitarse la ropa mojada y que entrará a bañarse realmente.

—Es un trato especial, pequeño.

Su papá le dejo bañarse tranquilamente está vez, Sean suspiro sintiendo el agua caliente en su cuerpecito y sonrió pensando en Zed. Había aprendido a querer cada beso y abrazo, cara mimo y mirada que el niño mayor le daba.

Su papi Li no quería al azabache y Sean lo sabía, pero era normal. Ningún padre querría a alguien que quisiera robar el amor de sus hijos o pareja, le veía como un rival y Sean sinceramente amaba eso. Que su padre temiera perder su amor.

Una vez cambiado y listo para la escuela Sean se acercó al comedor donde Carrie pintaba sus uñas con aquel barniz que tío Harry le había regalado. El castaño no entendía como era que su hermana se pintaba las uñas si ella odiaba todo lo femenino, ella misma decía que nunca sería como las demás niñas princesas. Y aquí estaba, viendo sus uñas recién pintadas perfectamente.

—Te queda bien el rosa—halago el mayor sentándose en su lugar de siempre.

La niña sonrió achinando los ojos como papá Liam lo hacia y con un gesto egocéntrico contestó—Lo se.

Sean recibió un desayuno especial y muchos cariños de papá Zayn, este le prometió un gran regalo cuando llegará de la escuela. Sean se conformaba con su amor todos los días.

—¿Listos para ir a la escuela?—pregunto Liam llegando a la cocina, beso a su esposo como todos los días y froto su mejilla sobre el cabello azabache—Tomen sus cosas, niños.

Carrie fue la primera en salir por sus cosas a su cuarto seguida de Sean, pero el niño están tan distraído viendo como su papi Li abrazaba, besaba y miraba a papi Zayn. Había tanto amor en esa atmósfera y Sean se sentía feliz de tener a unos padres que se amaran de ese modo a pesar de tantos años.

El camino a la escuela fue un poco mas ruidoso, Carrie exigía canciones de los Rolling stones, esa era culpa de tío Harry y todos lo sabían, el abogado golpeaba sus dedos sobre el volante con su hija cantando y al pequeño cumpleañero sonriendo.

Observo a sus primos esperando fuera de la escuela, Sean sintio un poco de nervios al saber lo que le esperaba cuando bajará del auto.

Y como si fuera pronosticador, una lluvia de abrazos, besos y felicitaciones no se hicieron esperar. El pequeño cuerpecito del niño era aplastado por todos, hasta que Zed llegó a su rescate.

—Dejen en paz a mi osito—gruño el mayor jalando hacia el al castañito, mirando mal a los demás niños—Casi me lo aplastan.

Zed acomodo los cabellos rebeldes de su pequeño osito, sonriendo por el adorable puchero que le presentaba el niño. Beso castamente los labios color sandía escuchando como el papá de su bebé chillaba molestó.

—Ya, escuincle—gruño Liam atrayendo a su retoño fuera del alcance de los labios libertinos—Ya te dije que todavía está pequeño para eso...Siempre va estar pequeño para esto, mejor deberias alejate de él, King.

Sólo obtuvo una sonrisa burlona del pequeño, los demás niños parecían muy entretenidos con el duelo entre yerno y suegro, más bien un poco aterrados de decir o hacer algo que los pusiera en la mira del lobo.

—Y yo la le dije que Sean es mi osito, por lo tanto puedo besarlo—tomo la mano del castañito sin dejar de sonreir—Suegrito.

Payne contó hasta diez, tomado respiraciones y recordando que por homicidio podían darle hasta cadena perpetua.

—Vendré por todos a la misma hora, no me hagan esperar.

Se dio la vuelta sin más, Liam no admitiría que aquello lo decía esperando que Zed King se tardará para poder dejarlo tirado y quizás con suerte, que fuera comido por coyotes.

—Tu papi sigue sin quererme, ¿He?—comentó Zed abrazando a su bebé, beso la cabeza llena de rizos e incitó al niño a caminar al interior del lugar.

—El está celoso porque cree que tu tomaras todo mi amor y no le dejaras nada a él—Sean se encogio de hombros, aspiro el dulce olor de Zed, usaba un perfume tan rico que hacia flotar al castaño.

El azabache no contestó nada a aquello, porque Sean no debía enterarse que claramente aquello era lo que Zed queria. Quería todo el amor del castañito, quería hasta el último gramo de atención sólo para el. Quería todo para el, sólo para el.

Pero claramente su osito no tenía que enterarse de sus fines oscuros y malvados.

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Como había dicho Liam si había pasado por ellos, pero no lucia uno de sus trajes elegantes, iba en pantalones mezclilla apretados y camisa con los primeros tres botones abiertos.

—No puede ser, ¿Papá no entiende que despierta pasiones bajas?—gruño Carrie. Se paró frente a su padre cruzada de brazos y labios en línea recta—¿Se puede saber porque viene vestido asi?

Liam alzó una ceja a través de sus lentes oscuros y sonrió a su princesa.

—Porque salí temprano de trabajar y llegue a casa para cambiarme por algo más cómodo, ¿Esta mal, amor?

—¡Claro que está mal!—riño, ambas manos en las caderas—¿Qué no entiendes que no debes despertar pasiones? Le voy a decir a papá Zayn.

El abogado se golpeó mentalmente abriendo la puerta trasera para que los niños subieran. Miro a Zed ir hacia el lado del copiloto con Sean de la mano. Lo dejaría pasar por ahora, por el cumpleaños de su bebe.

Una vez en casa Liam hizo que Sean entrará primero, siendo recibido por toda su familia. Globos y confeti volando por toda la habitación.

—¡Ahí está mi bebé grande!—Zayn salió de entre todos para abrazar a su bebé y llenar su rostro con besitos—Tengo un regalo para ti.

Shel le tendió una gran caja a Zayn para que este se la diera a su hijo.

—Abrelo—pidió cubriendo sus labios con ambas manos, el niño hizo lo pedido—Tu papi Liam me lo regalo cuando yo tenía diez años.

Un oso de tamaño mediano apareció en su campo de vista, parecía un poco maltratado por los años, pero seguía lindo. Y Sean sonrió viendo a sus dos papás.

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Hola, después de mil años jejeje
¿Cuantos seguimos Aquí?
Ojalá les siga gustando está fic, porque estoy tratando de darle ya un desgraciado final, luego vi que faltan algunos capítulos y baia baia baia

Como sea, dejen por ahí sus comentarios, votos y nos leemos pronto 🤗

Perdón por cualquier error que vean👀

Y aprovecho para invitarlos a que pasen a por mi nueva fic El Retrato De Z Malik. El primer capítulo ya está y pronto actualizó 🌟

Mucho amor💜💜