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   El peliplata había soltado un grito desgarrador, estaba adolorido en ese lugar y sollozaba mientras reprimía el dolor al morderse los labios.

DY: ¡¿Qué diablos creen que hacen?!   ¿¡Cómo se atreven ustedes dos!?   - Gritaba tan fuerte que los vidrios rechinaban.

JH:  ¡¡Taeyong hyung!!,  ¿te encuentras bien?  -  Preguntó el rubio quien había sido brutalmente empujado hacia la pared casi atravesandola. 

DY: ¡¡¡TU!!  ¡¡LO HAS TOCADO!!    ¡¡HAS TOCADO MI PROPIEDAD!!    ¡¿SABES LO QUE ESO SIGNIFICA JUNG JAEHYUN?!   - Un Taeyong asustado miraba al pura sangre mostrando sus largos colmillos amenazando al menor.

TY: ¡ESTOY BIEN JAEHYUNIE!   ¡¿QUÉ TE PASA, KIM DOYOUNG?! - Gritó el cazador mientras se levantaba con dificultad de la cama. - ¿¡¡Estás bien, Jaehyunie!!?  

JH: Estoy perfectamente no te preocupes, hyung. - Respondió levantándose con dificultad.

"¡¿Desgraciado, tu en mi ausencia te metiste con él!?"

    La escena de los dos prefectos hizo arder más los celos del pelinegro puesto a que el cazador nunca le había llamado de forma tan amorosa ni se había preocupado por él.  Sus ojos se volvieron de un siniestro rojo escarlata, sus poderes se desbordaron causando que las ventanas y cualquier tipo de cristal en la habitación explotaran.

    Los fragmentos volaron por todas partes a gran velocidad y en un rápido movimiento el ojiceleste abrazó al peliplata protegiéndolo del peligro siendo herido en muchas partes. 

JH: ¡Aquí hyungie descuida...! 

TY: ¿¡Jaehyunie?!   ¡No! - Gritó el prefecto mayor al percibir el fuerte olor a sangre.

JH -Descuida algo como eso no va a matarme... tu chico es fuerte, sanaré rápido. -  Bromeó el rubio con dificultad.

    Los cristales le habían atravesado todo el cuerpo y con su poder de autosanación expulsó los fragmentos lentamente pero sin importar que estuviera sanando las heridas dolían como un infierno y tardaban en cerrar.

"¿¡¡¡USTEDES DOS VAN A SEGUIR?!!!"

DY: ¡¡¡ALÉJATE DE ÉL!!!. - Ordenó fríamente el rey acercándose a ellos amenazadoramente. - ¡¡DIJE QUE LO SOLTARAS!!  ¡¡ES UNA ORDEN!!    ¡¡O MORIRÁS AQUÍ MISMO!!  - Jaehyun sufría por las heridas y si Doyoung lo atacaba con su fuerza seguro perdería.

TY: - ¡NO TE LE ACERQUES!- Esta vez fue Taeyong quien se interpuso ante el peligro y su amado. - ¡NO DEJARÉ QUE LE HAS DAÑO AL HOMBRE QUE AMO! 

    Doyoung podía ver con claridad el odio en sus bellos ojos pero  esta vez era diferente que antes, más allá que por ser un vampiro lo odiaba por herir al menor a la persona que él quería. Como una rafaga atacó a Jaehyun nuevamente quien cayó aturdido a metros de allí, el pura sangre se volteó, miró a Taeyong y mientras caminaba  hacia él aflojaba su corbata y se quitaba el cinturón para desabotonar su pantalón.

   Un temblor recorrió el cuerpo del cazador la bestia venía a devorarlo como siempre lo hacía y lo odiada, rápidamente corrió a buscar su arma para dispararle pero en un abrir y cerrar de ojos Doyoung tomó sus muñecas con una fuerza sobrehumana que ni Taeyong podía combatir. 

"Ayuda..."

DY: ¡ERES MÍO! - Dijo molesto. - ¡TÚ ME PERTENECES  DESDE HACE TIEMPO! - Lo jaló hacia él, Taeyong luchaba por quitarselo pero estaba siendo prisionero de la fuerza del pura sangre.

Déjame amarte (nct Jaeyong)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora