AMAIA! -Escuché que me chilló Alfred desde la puerta- ¿Puedes venir?
A regañadientes me levanté, y cuando llegué a la puerta no podía creerme lo que estaba viendo un sonriente Raul con mi ukelele en la mano.
- Hola, te he traído el ukelele, lo tenias en mi casa- dijo mientras me tendía el ukelele para que lo cogiera.
La cara de Alfred era un poema, entre enfado y decepción.
- Bueno esto era todo, no os molesto, ya me voy- Se le notaba en la voz que estaba dolido, supongo que no esperaba ver a Alfred abriéndole la puerta con tanpoca ropa.
- Gracias por traérmelo - dije deseando que se acabara la conversación.
Alfred se fue de la puerta, en dirección a la habitación, momento que yo aproveché para hablar con Raul.
-¿ Que haces aquí Raul? - dije bajando un poco la voz.
- Te he dicho que te había traído el ukelele, no sabía que estabas con el, que por cierto, has tardado bien poco en reemplazarme.
- Raul no empecemos, tu mismo me dijiste que buscara lo que sentía.
- Si Amaia, pero no pensé que lo harías tan rápido, pero bueno, da igual, es mejor que me vaya.
-Si es mejor - le dije un poco enfadada
-Adiós Amaia
-Adiós.
No podían estar pasándome todas estas cosas, si esque cuando guardas secretos se te explotan en la cara, si le hubiera contado a Alfred todo lo de Raul no estaría en esta situación.
Cerré la puerta y me dirigí a la habitación para hablar con Alfred de lo que acababa de pasar, pero a mitad camino me lo encontré dirección a la puerta.
-creo que es mejor que me vaya
- No Alfred espera, puedo explicártelo todo - dije mientras le cogía del brazo para que se detuviera.
- No tienes que darme explicaciones, si hubieras querido contármelo lo hubieras hecho antes, no ahora, así que creo que es mejor que me vaya, tengo que pensar las cosas.
-Alfred por favor - dije suplicándole.
- No Alfred por favor no, Amaia, no entiendo nada. Tanto que me has echado de menos y aparece un chico en tu puerta trayéndote algo que te has dejado en su casa? Seguro que no me has echado tanto de menos como dices, pero yo soy un idiota y te creo, y caigo en tus brazos porque eres una maldita droga para mi, pero así no puedo Amaia.
-Alfred...- le dije con lágrimas en los ojos.
-Ya hablaremos- dijo mientras abría la puerta y la cerraba tras de él.
PRESENTE.
-Vale Osea un resumen - dice Aitana que estaba flipando con todo lo que le estaba contando-primero os visteis en el ascensor, que vaya tela con el destino.Te dijo que quería hablar contigo de vosotros, y tu te hiciste la dura. Pero luego en la cena de Ana te acompañó a casa y te besó, y tu decidiste que era un buen momento para subírtelo a casa, en que estabas pensando Amaia?
- Ay yo que sé Aitana, no pensaba en nada.Encima nos habían hecho las fotos y no sabia como reaccionar.
- Decides subírtelo a casa y os liáis, que si no llega a ser por la llamada de Toni las dos sabemos como hubiera acabado esa noche.
Entonces aparece Raul con las fotos, muy oportuno el chico y te dice que te va a dejar tu espacio. Muy majo por cierto.
-Si - dije bajando la cabeza.
- Y entonces quedas con Alfred y revolvéis la tensión que se quedó sin resolver, pero claro, esto no acaba ahí, porque aparece otra vez Raul devolviéndote el ukelele y claro, como no le has contado nada a Alfred pues se queda loquísimo y se va. Y hasta aquí.
- Si, se podría decir que es un buen resumen.
- Vaya dramón, ¿ Como se te ocurre no contarme estas cosas? Pero sigue sigue, que parece que hay mas - me dijo poniendo cara de espectante.
-Si hay mas si...
- Una ultima cosa Amaia- dijo cogiéndome las manos - ¿Le quieres?
- Con todo mi corazón- dije con un tono redundante tocándome la tripa inexistente.
- Pues lucha por él- dijo esbozando una sonrisa- y ahora sigue porque me muero de ganas de saber como sigue.
PASADO.
La semana fue pasando lenta, no sabía nada de Alfred ni de Raul, había intentado hablar con Alfred le había dejado algún mensaje que no me había contestado.
Lo había vuelto a perder y ni siquiera habíamos empezado. Era una sensación bastante dolorosa. Tenia que arreglarlo, o por lo menos hacer que me escuchara y luego que el decidiera.
Un mensaje que llegó a mi movil hizo que el corazón se me acelerara, pero una decepción inundó mi cuerpo cuando descubrí que no era un mensaje de Alfred sino de los Javis en el grupo de los triunfitos, venían a Barcelona y querían hacer una fiesta con todos.
Era la oportunidad perfecta, allí podría hablar con el y explicarle lo de Raul.
La fiesta era el sábado y hoy era jueves, así que tenia dos días para pensar en como hablar con él, suponiendo que vaya a la fiesta, aunque pensándolo bien, Alfred no se perdería una fiesta de los Javis nunca.
El sábado llego bastante rápido, me planté frente al espejo para ver que me ponía, quería ir guapa, pero sin que se notara que me había arreglado por lo que opté por unos pantalones anchos negros y un top de flores, dejando ver un trozo de mi tripa, me maquillé sutilmente y dejé mi pelo ondulado, me veía bien.
Esta es tu noche Amaia, puedes hacerlo me repetía una y otra vez mientras me miraba al espejo.
Miré el reloj, me sobraba tiempo, cosa rara en mi por lo que decidí ir andando hasta el local donde nos habían indicado los Javis que iba a ser la fiesta.
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Holaa!
Como estais?
Pues hay fiesta, que creeis que pasará? Discutirán en la fiesta?
Espero que el salto temporal no os haya perdido.
Dejadme impresiones y cosas en los comentarios.
Gracias por leerme
Un cariñazo
