Prometidos

Capitulo 22

Pasaron unas semanas y Hermione seguía sin recordar nada. Todos intentaban por todos los medios hacerla recordar, llevándola a lugares en los que estuvo y presentándole de nuevo a personas. Harry y Ron estaban muy afectados. Las clases seguían, pero a Hermione se las perdonaron. Después de todo era una alumna modelo. Draco tampoco tenía clases, era el encargado de cuidarla, y eso a Harry y a Ron no les sentaba bien. Draco veía como Hermione le cogía confianza, pero ya no le miraba con esos ojos llenos de amor. Lo estaba pasando realmente mal. No sabía como hacer.
Un día Draco fue a despertar a Hermione. Estaba más convencido que nunca que ese día haría que recuperara la memoria. No soportaba tenerla tan cerca y no poder besarla, ni siquiera abrazarla. Recordaba que el día anterior, le había dado un abrazo cariñosamente y cuando ella vio que el intentó besarla, se apartó rápido muy avergonzada. Se había dejado llevar.
Cuando ella se desperezó bostezando y le sonrió, tuvo otro impulso de hacerlo. La veía tan sexy con el camisón que tuvo que mirar a otro lado. De pronto lo vio. Un álbum había encima de la mesa y sabía perfectamente que estaba repleta de fotos que Hermione había hecho durante todo el curso. Eso podría servir, eran recuerdos bonitos y seguramente la haría reaccionar. Lo cogió y lo abrió y efectivamente allí estaban las fotos. Se acercó a Hermione y se lo mostró. Ella puso cara de desconcierto. La hizo sentarse a su lado en la cama y lo abrió. Ella muy concentrada comenzó a mirar las fotografías.
-¿Te recuerda algo?-dijo esperanzado.
-No, lo siento.
Hermione se sentía mal de no poder complacer a Draco, ya que parecía bastante importante para el, y ella no sabía por que. Siguió mirando y Draco paró en la primera que hicieron, en la que se besaban. Hermione le miró sorprendida.
-¿Somos nosotros?
-Si, así es.
-¿Éramos novios?
-Mas o menos...
Hermione cerró los ojos de golpe. Había sentido un dolor en la cabeza. Se llevó la mano a la cabeza cuando otro pinchazo la vino.
-¿Te encuentras bien? ¿Recuerdas algo?
-No se, me dolió la cabeza...
Volvió a mirar la foto y ocurrió lo mismo. Era como si todos sus recuerdos estuviesen intentando despertar. Draco tiró el álbum a un lado y la abrazó fuertemente, para ayudarla a superar ese dolor penetrante.
-Hermione recuerda...te amo...vamos...
No pudo más y la besó. Esta vez ella no se quitó, estaba como ausente, sintiendo el beso cálido que el la brindaba. De pronto, todo un torbellino de recuerdos comenzó a pasar por su mente. Sus cursos anteriores, el cambio de este curso al enterarse de la noticia de estar prometida con Draco, Su amor por el y ese amor correspondió, Grindewald, todo lo ocurrido...todo. Recordaba por fin y devolvió el beso con toda la pasión que pudo. Draco se separó y agarrandola de los brazos la miró muy esperanzado.
-¿Hermione?
-Si, Draco. Recuerdo todo por fin.-le abrazó cerrando los ojos.-Te amo.
-Y yo...
Durante largo rato se profesaron su amor eterno. Estaban tan felices de estar juntos...
* * * * *

Habían pasado varias semanas y se acercaban los exámenes. Hermione y Draco tenía que ponerse al día de todo, pero juntos, lo hacían muy bien. Al final todo el colegio se había enterado que verdaderamente estaban prometidos. Ya les daba igual. Además, los alumnos lo aceptaban.
Los exámenes llegaron y Hermione y Draco salieron satisfechos de ellos. Había estudiado tanto que estaban seguros de conseguirlo, ya que estudiar juntos fue más ameno. Todos los alumnos paseaban por los terrenos del castillo, hacía calor porque el verano se acercaba. Draco y Hermione se tumbaron el la hierba fresca para darse mimos. Harry y Ron llegaron en ese momento.
-Hermione...eh...-vio a Draco, todavía no se acostumbraba Harry.-Tus padres y los de Malfoy están en el despacho de Dumbledore...
-Gracias Harry.-miró a Draco.- ¿Qué querrán?
-No se, vamos.
Se levantaron y se fueron de la mano mientras Harry y Ron les miraban Llegaron y llamaron a la puerta.
-Pasad.-dijo Dumbledore desde a dentro.
Se saludaron y abrazaron a sus respectivos padres.
-¿Qué pasa?- Hermione no aguantaba mas.
-Nada cariño. Vinimos a ver si todo iba bien.-dijo su madre.
-Dumbledore nos acaba de comunicar que habéis conseguido las notas más altas en los EXTASIS.-dijo Narcisa emocionada.-Draco, podrás trabajar en el ministerio como tu padre.
-Y tu Hermione, podrás trabajar en San Mungo.-dijo su padre.
Draco y Hermione se miraron sonrientes.
-Enhorabuena chicos.-dijo Dumbledore.
-Gracias señor, fue un placer estudiar a su lado.-Draco señaló a Hermione.-Es muy inteligente.
-Gracias Draco.-estaba roja.
-Draco, ¿te importaría venir con Hermione esta noche a cenar a casa?-dijo Lucius.
-No, allí estaremos, debemos celebrarlo.
-Si, además tenemos que hablar de vuestro enlace.
Se despidieron y los dos chicos, llenos de alegría se fueron a su sala común donde no serían molestados. En cuanto se cerró la puerta Draco la pegó contra ella y la comenzó a besar mientras la tocaba el pelo sensualmente. Después la besó el cuello y Hermione creyó morir de pasión. La abrazó y comenzó a dar vueltas con ella, riendo.
-Hermione, menos mal que nos prometieron, porque si no me hubieran dejado casarme contigo, te hubiera raptado y lo hubiera hecho.
-¿Quien nos diría que acabaríamos así?
-Hubiese creído que estaba loco, pero ¿como pude estar tan ciego?
-Yo también.
-Perdóname por todo lo que te he hecho.
-No digas nada.
Se besaron, estaban muy felices. Después comenzaron a prepararse para la cena especial de esa noche.