❝No dejaré que caiga el mundo
Quiero sostenerlo
Luchar por él... ❞
Peter Parker Fanfiction
VOLUMEN XIII DE LA SAGA OLYMPIC HEROES SERIES
#2 en peterparker
#1 en tomholland 16/09/2018
#1 en civilwar 26/03/2019
#1 en avengers 10/07/2020
•Ganador...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
CAPÍTULO TREINTA Y UNO
╔════════════╗
―Amm... sí es probable que debamos hacerle más pruebas antes de mañana. ―Ava chasqueó la lengua, tachando de forma compulsiva sus últimas anotaciones en la liberta. Frunció el ceño, nerviosa; al advertir que la punta del bolígrafo había atravesado la página.
―Debe estar listo para la feria de ciencias ―puntualizó Peter Parker, sentado al otro extremo del laboratorio, sin despegar un sólo momento la mirada de sus apuntes, pero éstos volaban sobre la hoja en múltiples direcciones; lo que le impedía concentrarse.
―Vale, ¿mañana?
―Mañana. Guay.
―Okay.
Ava metió en su mochila la libreta y el bolígrafo, mientras acomodaba su largo cabello sobre uno de sus hombros. La temporada de octubre abría paso al auge del otoño, por lo que la brisa fresca inundaba todos los pasillos de Midtown. Ava salió del aula de ciencias, siendo secundada por su... compañero.
Ni siquiera ella se la creía pero ¿qué podía hacer? Peter no había sacado el tema del beso a colacion, por lo que ella no quería parecer desesperada por obtener una respuesta de su parte.
La noche anterior habían vuelto a casa del arácnido, y May ya había llamado a Awilda, justificando la ausencia de Ava. Esa noche la castaña terminó por dormir en el cuarto de May mientras que ella dormía en el sillón. Ahora mismo, Ava vestía una camiseta del joven Parker, tuvo que reutilizar los pantalones, por cierto. Lo único que quería hacer en ese momento era llegar a casa para darse una ducha.
La ducha, el beso, la tarea que no hizo; todo se unía para en conjunto conspirar contra la estabilidad emocional de la chica. Simplemente quería esconderse y no saber del mundo nunca más. Porque, había que admitir, que el beso entre ella y Peter no era la cosa por la que más debía preocuparse. Némesis ya había atentado contra la vida del chico, ¿iba a dejarlo pasar? Por supuesto que no.
Si había prometido protegerlo, al igual que él, debía encontrar la manera de hacerlo. Incluso si aquella alternativa no era de su total agrado.
―¿Te encuentras bien? ―preguntó Michelle de improviso, llegando a ella antes que Ava tropezase con sus propios pies. Su mejor amiga le miró con el ceño fruncido antes de proseguir―: no te ves muy bien, Ava.
La latina negó con la cabeza vehementemente. Ambas chicas caminaron al casillero de la chica de doble identidad. Al abrir la taquilla, enterró su cabeza dentro, soltando un gemido ahogado
