La elección. Shikatema Fanfic

Flor

Hola! Lamento muuucho la espera, estaba como muerta imaginando como plasmar lo que quería plasmar en este capítulo pero sin dejar de lado las situaciones que quería que se presentarán... espero entiendan el significado de lo que quería dar a ... entender xD y disfruten!!!

Temari había dejado la habitación, ahora estaba frente a uno de los grandes balcones del Castillo, cualquier que la mirara de espaldas pensaría que la reina lloraba por el inquietante movimiento de sus hombros pero la verdad no... la reina reía, y había corrido hacia acá para poder soltar las carcajadas más traviesas y por los motivos más vergonzosos de su vida, porque recordaba muchas cosas y sensaciones que por alguna razon no dejaban de hacerla reír.

Estaba feliz, sentia que se había perdido de mucho por una vergüenza inutil, por un orgullo prejuicioso y un chico imbecil que podría ser haber sido cualquiera y de seguro hubiese sentido lo mismo ¿No? O bueno... eso lo estaba dudando desde hace algunos segundos, cuando pensaba e imaginaba las lindas caras de placer que ella podía hacerle poner... eso la hacia sentir, dominante. (Y a Temari le encantaba ser dominante... le fascinaba), no es como si ahora fuese aprovecharse de eso para conseguir beneficios pero... lo podía hacer suyo, podía lograr mucho con el apoyo de un esposo que estuviera así de loco por ella... espera... ¿qué cosas estaba pensando? ¿acaso ella no había actuado igual que el? ¿y si el estaba pensando lo mismo? ¿y si el quería aprovecharse de ella? No... No podía, ella no lo permitiría.

Sabía perfectamente que si algo dominaba esa relación no era el amor, ella no lo amaba , puede que le tuviera cariño, le gustará, lo deseara... pero amar, no.
El no la amaba, quizás le gustaba muchísimo o la odiaba bastante, o quería sacarle provecho a su país, o le gustaba estsr con una chica como ella... Ah... como cuando le agradeció por ser la reina, eso fue tierno... ¡pero amor, amor no había!

Tenían que amarse... ¿No? Para que existiera la confianza de seguir revelando sus debilidades sin el temor de que alguno fuese a aprovecharse...

Temari llevo la mano a su rostro. ¿qué cosas estaba pensando? ¿porque siempre tenía que arruinar los lindos momentos con sus ideas tontas y pensamientos de ese tipo? Pues... su padre siempre peleaba con su madre, ella lloraba y lo perdonaba cuando el hacia cosas lindas, cuando el tocaba sus debilidades pero... No significaba que todos fueran así, su abuelo no lo fue... Y su padre, bueno, al final no lo fue. - ¿Porque me fui? ¿porque dejas la habitación Temari? ¿porque tratas de ocultar tu vergüenza con ideas de conspiraciones?...- se ahogó en sus manos las cuales se apoyaban sobre los codos en el balcón.
Comenzó a sentirse idiota... avergonzada, el de seguro esperaba un buen saludo, algo romántico, algo digno de una esposa... No una huida. Temari entonves suspiro, ella no era del tipo romántica, pero si quería ser una buena esposa... queria ser alguien que lo apoyará en decisiones y en alguien en quien el pudiera confiar, quería tener el derecho de poder ofrecer ideas sin el temor a ser rechazada por su género, que su esposo y rey la apoyará y ella a el, ser una madre y reina que todos idolatren, crear, innovar... pero definitivamente ese tipo de cosas no iban a suceder así, con desconfianza, vergüenza, inmadurez, orgullo... ¿porque era tan orgullosa?

- La habitación del rey está por acá... - escucho decir a una voz masculina. Luego algunos tacones y unas risas femeninas. Temari dejo el balcón y se adentró en el pasillo, siguio las risillas y se encontró con un grupo de personas que se dirigían a la habitacion del rey.
Temari ahora se encontraba tras ellos, un señor regordete, Theo, una rubia bastante sofisticada, a su lado, una mujer de cabellos castaños, ambas abanicandose a pesar de que no hacía tanto calor, de cada aleteada salía un perfume horrendo... demasiado dulce. Nadie noto su presencia, estaban ocupados mirando la puerta a la espera del rey.