Cita 1/2

2.8K 460 105
                                    

Si bien Jaebum le había pedido hace un par de semanas una cita a solas a YoungJae, no habían logrado concretarlo. Jaebum todavía luchaba con los nervios cada vez que veía al menor. Llegó a creer que podrían pasar años y él seguiría sintiendo su corazón latir con fuerza y millones de mariposas revoloteando en su estómago. Según YoungJae eso era extremadamente adorable, pero para Jaebum era un gran obstáculo ya que nunca podría avanzar con el menor, y Yugyeom riéndose de él porque jamás lograrían hacer algo más que besarse tampoco ayudaba demasiado.

Viendo un documental de parejas a las dos de la mañana decidió que dejaría de una vez por todas los nervios y se comportaría como el hombre que YoungJae merece. Uno seguro de sí mismo.

Esperó a que el rubio saliera de su salón de clases e inmediatamente lo arrastró de la mano hacia el exterior.

—¿Jaebumie? ¿S-sucede algo? — el nombrado pareció pensarlo antes de responder.

—T-tendremos una cita. Y n-no puedes negarte.

—¿Una cita? Oh~ ¡Una cita! — dio un pequeño saltito bastante feliz con la noticia — ¿Qué haremos? — Jaebum se detuvo en seco. Esa era una excelente pregunta porque no había planeado nada.

Mientras pensaba en que decir o hacer, notó al menor con la vista fija en algún lugar. Dirigió también la suya hacia allá logrando divisar una máquina llena de pequeños peluches.

—¿Quieres ir? — YoungJae miró al mayor, bajó la vista, y sonrojándose, asintió. Para fortuna de Jaebum, era realmente bueno en esas cosas y podría sorprender al menor, al menos una vez en su vida — Vamos entonces.

Con el menor siguiéndolo y tomados de la mano caminaron hasta el local lleno de máquinas tragamonedas y algunas más de peluches. YoungJae tenía su atención fijada en una en específico.

—Nutrias... — una máquina llena de nutrias de peluche lo cautivó. Por supuesto el mayor entendió inmediatamente lo que quería.

No necesitó de muchos intentos, sólo tres, y en uno de ellos consiguió tomar dos nutrias con la garra.

—¡Eres increíble Jaebumie! — el mayor sonrió orgulloso mientras ponía otra moneda.

—Es tu turno.

—Y-yo no soy tan bueno, ¡pero lo intentaré!

Ahora se sentía insignificante.

YoungJae no sólo había conseguido una nutria en cada intento, sino que además consiguió el elemento sorpresa que cada máquina traía. Era un bonito par de anillos, aparentemente de pareja.

—Sólo fue suerte — dijo para tranquilizar al mayor — Dame tu mano — abatido obedeció lo que el rubio pedía. Sintió algo frío pasar por su dedo anular — Ahora tenemos anillos de pareja — sonrió, eliminando por completo la “tristeza” del azabache — A-ambos son púrpura, lo siento.

Jaebum observó su mano, luego la de su novio, y sonrió.

—Luce como si estuviéramos casados...

—¿E-eh? — YoungJae se sonrojó hasta las orejas al oír lo que Jaebum, aparentemente, había soltado sin pensar. Y de hecho así fue, pues de inmediato cubrió su boca, como intentando hacer pasar desapercibidas aquellas palabras.

Aunque ambos se encontraban increíblemente avergonzados, sonrieron, pues en su mente estaba el mismo pensamiento.

Casados...









No, no se van a casar. Aún es muy pronto para eso JAJAJDJFJFJ

Tsundere [2Jae]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora