Here by Choice · {Warmi}

Capítulo II

Mimi: -No sabía que bailabas tan bien- dijo una vez ambas salieron de la discoteca

Ana: -Hacía mucho que no bailaba- susurró mientras sacaba un cigarro de su bolso, lo encendió y le dio una larga calada -¿quieres?- le preguntó ofreciéndole la caja de tabaco, Mimi negó y sonrió

En ese momento, la canaria sacó su móvil y miró la hora, las 4:30 de la madrugada ¿Cuánto tiempo llevamos bailando? Se preguntó confusa, miró las notificaciones y vio un mensaje de su novio

"Jadel: Al final llego antes, te veo en casa"

Lo había enviado a las 23:30, Ana abrió bien los ojos, tiró el cigarro al suelo pisándolo y guardó de nuevo su móvil en el bolso

Ana: -Me tengo que ir- dijo nerviosa

Mimi: -¿Ahora?- dijo confundida -¿Va todo bien?- Ana asintió mintiendo

Ana: -Dile al resto que me tuve que ir, que ya los veré- Susurró comenzando a caminar tambaleándose un poco

Mimi: -Ana, ¿Cómo te vas a ir así? Déjame un segundo y te llevo- la rubia se veía preocupada

Ana: -No, en serio, estoy bien, no te preocupes- Sin más, Ana comenzó a caminar por las frías calles de Madrid sintiendo el frío calar sus huesos, en unos 20 minutos ya se encontraba en el portal del edificio, al entrar suspiró y subió al ascensor, al llegar a su rellano se quitó los tacones con cuidado y caminó hasta su puerta, abriéndola con la mayor sutileza posible

Al entrar en el piso, dejó los tacones en el suelo con cuidado, el bolso en el mueble de la entrada y caminó hacia el dormitorio con sigilo, entró en este y sin hacer el más mínimo ruido caminó decidida hacia el baño que había en la habitación

Jadel: -¿A donde te crees que vas?- el cuerpo de Ana tembló ante esas palabras, la luz de la habitación se encendió y Ana giró a ver a su novio con una expresión de miedo total

Ana: -Y...o- tartamudeó la canaria recibiendo un bofetón que la hizo caer al suelo, se cubrió la mejilla con la mano tratando de no llorar

Jadel: -¿¡De donde coño vienes a estas horas así vestida!?- chilló haciendo que Ana se encogiera en el sitio –Que me respondas- dijo agarrándola por el pelo y poniéndola de pie

Ana: -Jadel para por favor- le pidió derramando alguna lágrima

Jadel: -Eres una puta, eso es lo que eres- dijo comenzando a golpearla, no era la primera vez que le pegaba, Ana aún tenía moratones y cicatrices de la última vez, pero sí que esta vez no estaba siendo tan cuidadoso como siempre, Jadel siempre trataba de golpearla en sitios que se pudiesen cubrir con ropa y nadie los viese, pero esta vez no estaba teniendo ese cuidado

Ana lloraba desconsolada mientras el que había sido el amor de su vida la golpeaba sin cesar. Tras algunos golpes más, Jadel tiró a Ana al suelo y sacó una maleta del armario, metió las cosas de la chica a la fuerza en la maleta, y sin saber cómo, logró meter toda la ropa y cosas de la canaria en esta, en pocos segundos abrió la puerta de la vivienda y lanzó la maleta con fuerza al rellano, empujando luego a Ana junto a esta

-No te quiero volver a ver en mi puta vida- escupió con furia –Ah, y esto es tuyo- dijo lanzándole su bolso y sus tacones, Jadel cerró la puerta del apartamento de un portazo

Ana tomó sus cosas rompiendo en llanto, tenía un gran moratón en el pómulo, el labio roto, y un gran corte en la ceja, algunos golpes y heridas en los brazos y seguramente bajo el vestido podrían ver muchos más moratones, Ana trató de ponerse de pie como pudo y arrastró sus cosas entre lágrimas hasta el ascensor, llegó como pudo hasta el portal y una vez fuera del edificio se derrumbó sentada en el bordillo del este