Entre Héroes/Entre Villanos. [En Corrección]

XIII - H。「第三回」

-Ya llegué...- El bicolor dejaba sus zapatos en la entrada mientras se dirigía directamente hacia el refrigerador, tomando una botella de té verde y sentándose en su sofá.- Ya es muy tarde... Iré a entrenar a la habitación del viejo...

En la casa de Todoroki por lo general estaba sola, le gustaba así. Sus hermanos aún le ayudaban a su padre tiempo después de que este se disculpara con ellos y empezarán a acercarse más entre sí, para poder tener lo que nunca tuvieron en mucho tiempo... Una familia de verdad, y él sintió el sentimiento familiar por primera vez al llegar a U.A. y ahora al vivir con Yaoyorozu, ya sea en su departamento de ella o en casa de él, ellos nunca dormían separados.

Había entrado a su habitación y dejado la botella en uno de sus muebles, empezó a desvestirse, sacando de un cajón la ropa de entrenamiento que tenía. Ahora, se encontraba totalmente desnudo y tendido en la cama, un ambiente tan tranquilo que le empezaba a incomodar por lo que decidió levantarse y empezar a vestirse...

-Shōto... ¡Feliz aniver~- la morena había entrado a la habitación del bicolor, sorprendiéndose al encontrarlo solo con unos bóxer puestos. Su tez cambio a un rojo intenso, sentía que se iba a desmayar...- No creí que estuviera así de... Bien.

-¡M-Momo!, ¿qué...?- sin querer, Todoroki, del sonrojo y la pena que sentía liberó un poco de su quirk de fuego, quemando así su ropa...- ¡Maldición, la ropa!.

Minutos después de haber controlado el 'pequeño' incidente, Todotoki se encontraba en pijama, luego de quemar su ropa y parte de su cama, habían extinguido el fuego con el hielo de su mano derecha y un poco de té de la botella de Todoroki que había arrojado Momo al instante. Había sido un total caos.

-Lo... Lo lamento, Todoroki-kun. Yo quería darte una sorpresa pero no pensé que~

-No te disculpes, Momo. Fue mi culpa por no saber que estabas aquí... Ah y, feliz aniversario a ti también. No pude pasar a comprarte algo... Te lo compensaré con lo que tú quieras, ¿sí?.

-¿Lo que quiera?...- Ah no te preocupes, con estar contigo me es suficiente.

-Momo...- había soltado un suspiro ligero al oírle decir eso.-Tengo que casarme con ella.

-¿Sí?, ¿qué sucede, Shōto?.

-...- El bicolor se había bajado de la cama para poder ponerse de frente y arrodillarse con ambas piernas hacia la morena, quien la veía extrañada por su comportamiento.

-Shōto, ¿no te sientes cansa~

-¿Te quieres casar conmigo?...

-¿Eh?...- ¿C-casarnos?... Dijo... ¡¿Casarnos?!- ¿Qué...?

-¿Qué si te quieres casar conmigo?.- su expresión no había cambiado en lo más mínimo, la veía con semblante serio y totalmente despreocupado al parecer... O al menos eso creía la morena.

-¿Shōto?...

-Ehhh... Según yo te lo dije bien... Espera, me hace falta algo, ahora vengo, no te muevas...

Y de la nada, se levantó de su asiento y se dirigió a la entrada para salir, aquello había dejado muy confusa a la morena, se preocupaba de que estuviera ebrio por aquella salida al club de esa noche o que en verdad estuviera hablando en serio... Rápidamente, se levantó del lugar y pasó al baño de esa habitación para poder arreglarse, sacando de un bolso con el que cargaba maquillaje para poder aparentar una mejor imagen pero, la temblorina de sus manos lo impedían, al igual que su corazón, que no la dejaba razonar bien.

-Momo, estoy de vuelta... Yo~- No está... ¿Se habrá ido?, vaya... Y eso que yo quería decirle mis planes a futuro.

-S-Shōto...- había salido de aquella habitación muy cautelosamente, encontrándose con el muchacho a espaldas de esta, como si estuviese buscando algo.