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renjun estaba feliz.
kun lo llevaría a ver a yukhei, ya lo extrañaba mucho y su presencia era muy necesaria en la casa. renjun preguntaba todas las noches por él, también durante el día y en la tarde.
kun solo podía contestarle que se encontraba en el trabajo, no lo quería preocupar al decirle su verdadero estado, o sea que se encontraba lastimado gravemente en el hospital.
pero ahora ambos estaban en el hospital, específicamente en la sala de espera, que estaba vacía, así que renjun podía andar corriendo y saltando de acá para allá. el niño había preparado galletas para su papá, aunque estaban un poco quemadas y deformes, las había hecho con mucho amor.
la enfermera le hizo un gesto a kun, quien se levantó de la silla tomando a renjun como un pequeño costal de papas, casi y por poco suelta a winko, quien estaba atrapado en una de las manos del niño.
—puede pasar a ver a su hermano. —dice la enfermera rápidamente para después salir por la pequeña puertita.
—esposo. —murmura kun. no le tomó importancia y junto con el niño entró a la habitación donde se encontraba yukhei, estaba dormido y se veía tan tranquilo que temía hacer un ruido muy fuerte que lo despertara.
la carita de renjun instantáneamente se iluminó al ver a su papá sobre la cama. relacionó la escena como aquellos días donde yukhei dormía hasta tarde y renjun se dedicaba a despertarlo para que se fuera al trabajo.
—¡yukhei! —chilló. se soltó del agarre de kun para correr hacia la cama donde yacía el más alto. con dificultad, subió a la cama apoyando ambas manos, casi se resbala pero logró sostenerse de la orilla. —papá... —se acercó a su rostro esperando una reacción del mayor, aún así no la obtuvo.
renjun hizo un pequeño puchero. yukhei aún no se despertaba y el pequeño quería al menos un "hola" por parte de su oso feo.
—papá di hola. —sacudió el brazo de yukhei en forma de rabieta. —mira papi, así: hola.
kun miro la escena con un poco de lastima, por un lado sabía que yukhei debía descansar, pues uno no se recupera de un accidente automovilístico de un día para otro, y por el otro lado quería que renjun fuera feliz, sabía que el niño extrañaba mucho a su otro papá, tantos días de convivencia y se le es arrebatado así de la nada, claramente renjun no entendía lo que estaba ocurriendo.
—renren, papá está cansado ahora, ¿te parece si lo venimos a ver mañana por la mañana? a lo mejor y esta despierto para ese entonces. —dice kun, en su rostro se podía ver la decepción y la lastima que sentía por su pequeño bebé.
hizo un puchero, tomó el refractario con las galletas y lo dejó tristemente sobre la mesita del hospital. con la cabeza gacha camino a kun, quien lo tomó en sus brazos dispuesto a cargarlo hasta llegar al auto.
renjun esperaba poder al fin contarle a yukhei sobre su día, como la había estado pasando en su ausencia, o sobre los dibujos que había hecho, pero era el quinto día que venían y su papá no estaba despierto, si que dormía mucho.
antes de salir de la habitación, renjun se giró para darle una última mirada a su papá alto, con la carita preocupada miro a kun, dedicándole una débil sonrisa. —papá, a papá se le hará tarde para ir al trabajo.
esa oración faltó para que a kun se le escurrieran unas cuantas lágrimas, aún así trato de sonreírle al bebé para que no se preocupara. —no, claro que no, papá oso está de vacaciones y durante las vacaciones puede descansar mejor... como hibernar.
renjun asintió, algo confundido. —¿me extraña? yo si lo extraño mucho. —aún se equivocaba un poco con sus palabras, todavía debía practicar su vocabulario básico, aunque esos pequeños errores se le hacían adorables a kun.
—por supuesto que te extraña, renren. te quiere mucho, los dos te queremos mucho, muchísimo. estoy seguro de que no se separará de ti cuando se despierte. —le sonrió, abriendo la puerta con algo de dificultad, pues renjun ya pesaba un poco por culpa de las galletas y chocolates que yukhei le había estado dando a escondidas.
antes de que la puerta se cerrara y como por arte de magia, una voz se hizo presente por toda la habitación, congelando los pasos de kun, haciéndolo regresar e ingresar abruptamente de nuevo a la habitación.
—¿a donde creen que van mis dos personas favoritas de todo el mundo? —era la inconfundible voz de yukhei, la que renjun había calificado como "no suavecita" a comparación de la de kun. —¡trajeron galletas!
renjun jamás había corrido tan rápido en toda su corta vida de apenas cinco años y medio, no sabe cómo saltó de los brazos de kun, solamente sabe que ahora los tres estaban por fin, compartiendo un abrazo demasiado suave.
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✦ ━━ ❛ soft cuddles and ugly cookies❜━━✦
yessss, extrañaba escribir este fic, lit tengo muchos en proceso ahora mismo.
espero que este cubriendo sus expectativas :) y si no lo hace, igual les agradezco por leerlo y soportarme :) chauuu
