EL PROMETIDO DE MI HERMANA (con Siwon)

Capitulo 40

— ¿Es para mí? ¿De verdad?—voltee a mirarlo, él sonreía cruzado de brazos apoyado en el marco de la puerta— ¡oh! ¡No puedo creerlo! De verdad que no lo creo...—gritaba emocionada—

— Es todo tuyo...—se acercó a mi sentándose en la cama— ¿te gusta?

— ¿Bromeas? ¡Me encanta!—tome mi nuevo violín, el que Siwon acababa de obsequiarme, sacándolo de su estuche—pero... ¿Por qué un regalo?—acariciaba el instrumento con mis manos, sintiendo su suavidad, era muy hermoso—hoy no es mi cumpleaños ni nada parecido...

— Ya lo sé...—quito el violín de mis manos dejándolo en un sofá que había allí—pero, quería regalarte algo, no cualquier cosa, sino algo que te gustara, se cuánto amas la música y también sé que ya tienes uno—su mano subió hasta mi mejilla acariciándome, su mano era muy grande pero muy suave—pero, ahora podrás dejar uno en la escuela de música y el otro llevarlo a donde tú quieras para poder practicar... suena bien ¿verdad?

— Claro que si...—me puse de pie tomando su mano haciendo que el también quedara de pie—¿me dejas agradecerte?—el levanto sus cejas, para luego sonreír y asentir—

Sonreí de manera de manera provocativa entrecerrando mis ojos, mostrando mis largas pestañas, mis manos bajaron a su pecho y luego empuje su cuerpo haciendo que el cayera a la cama, levante un poco mi pollera para que me fuera más fácil recostarme sobre él, en ningún momento el aparto la vista de mis piernas. Apoye mis rodillas en la cama, incriminándome muy despacio hacia abajo para caer sobre su cuerpo. Humedecí mis labios y los acerque a los suyos, lamí con cuidado su labio inferior provocando cierto temblor en él, sonreí satisfecha e inicie una ronda de besos suaves y acompasados, Siwon paso sus manos a mi cintura acariciándome levemente, comenzando a subir mi blusa para tocar parte de mi piel.

— ¿Me agradecerás de esta forma?—su voz se oía entrecortada y tragaba saliva con dificultad—

— Así es, ahora yo tengo el control en mis manos... ¿te gusta?—puse una carita tierna y a la misma vez provocativa—

— Me encanta...—su mano llego hasta mis glúteos dando un ligero apretoncito—pero...—

— Oh...—gemí despacio cuando él se movió con rapidez quedando ahora el sobre mí—

— La situación puede revertirse...—sonrió de lado depositando un beso pequeño en mi cuello, un simple beso que hizo estremecer todo mi cuerpo por completo—¿quieres hacer algo por mí?—acaricio mi vientre subiendo y bajando sus manos, asentí mordiendo mis labios—quiero que te desnudes para mi...

Sentí que mis ojos se entreabrían por la sorpresa ¿había escuchado bien? Me estaba pidiendo algo tan perverso. Me miraba asustado como si habría dicho algo incorrecto.

— Lo sien...—empuje su cuerpo con mis manos interrumpiendo sus disculpas—

— Si eso quieres...

Me puse de pie de forma inmediata, Siwon apoyo sus codos en la cama mirándome con asombro, pareciera que por su cabeza cruzo la idea que me rehusara a hacer esto. Inhale fuerte dejando mis nervios y timidez de lado quitándome por empezar mis zapatos  y  unas hebillas que tenía en mi cabello, lo segundo que hice fue llevar mis manos a los bordes de mi blusa para comenzar a retirarla muy despacio, esta cayó al piso. Sonreí sintiendo mis mejillas arder, Siwon me miraba muy concentrado y de vez en cuando mojaba sus labios. Baje mi pollera de a poco moviendo mis caderas para que así esta pudiera descender más fácilmente. Mire hacia adelante y observe como el empezaba a retirarse su camisa y desabrochar su pantalón de vestir, los dos nos miramos sonriendo. Él se quedó de pie, estaba descalzo y solo tenía puesto su bóxer, llevó sus manos a este y tiró de ellos hacia abajo dejando ver su enorme erección ¡Dios! Parecía que me había quedado sin aliento. Un espectáculo único estaba frente a mí, él estaba completamente desnudo, su mirada estaba centrada en mí, en las dos prendas que me quedaban puestas. Levantó su mano señalando mi sostén y sonrió.