EL PROMETIDO DE MI HERMANA (con Siwon)

Capitulo 48

Gire mi cuerpo quedando de frente a él, oculte mi mano tras mi espalda para que el no viera lo que tenía. Sonreí como si nada pero luego mi sonrisa se borró al ver que estaba semidesnudo, solo con una toalla que cubría la mitad de su cuerpo, el agua todavia se deslizaba por su pecho, mis labios quedaron entreabiertos al ver como su cabello estaba húmedo, unas pequeñas gotitas de agua comenzaron a derramarse por su ceja derecha.

— Deberías vestirte—agache mi mirada avergonzada mirando hacia un costado—

— Oh, cierto, olvide que estaba casi desnudo—rio como si se tratara de otra de sus bromas, eso ni siquiera era gracioso—no me digas que esto te pone nerviosa...

— Claro que no—me atreví a levantar mi mirada algo molesta, el solo quería hacerme sentir incomoda, lo conocía muy bien y sabía que disfrutaba al hacer aquello—

— Ok...—levanto una de sus cejas aun sonriendo, comenzó a dar pasos hacia adelante quedando muy cerca de mi ¿Qué estaba por hacer? Continuo acercándose, al ver lo que se proponía retrocedí pero choque con su mesa de luz, el continuo avanzando hasta que lo sentí casi sobre mí, mis labios temblaron y creo que el resto de mi cuerpo también. Completamente nerviosa levante mi mirada encontrándome con la suya, mis ojos se cerraron al sentir una gota de agua caer sobre mi mejilla, el levanto su mano y al mismo tiempo se agacho un poco—

— Donghae...—estaba a punto de gritar al no saber lo que pasaría, pero preferí cerrar mis ojos con fuerza para no ver lo que sucedería—

— Buscaba esto...—exclamo como si nada, abrí mis ojos y vi que en sus manos sostenía un frasco de gel ¡que idiota soy! Me dije a mi misma—enseguida regreso...—dio la vuelta dándome la espalda, camino hacia el baño y podría jurar que escuche una leve risita de burla de parte suya—

Mire hacia todos lados como asegurándome de que nadie hubiera sido testigo de semejante momento incomodo, logre calmarme al repetirme por quinta vez que no había nadie más aquí y que Donghae era un tonto. Recordé la foto que tenía en manos, con rapidez volví a regresarla a su lugar para que nadie ni mucho menos Donghae supiera que había visto aquella fotografía.

Pasaron unos minutos y Donghae salió del baño ya vestido.

— Muero de hambre, vamos a la cocina por comida...

— Es tarde, debería ir a casa y...

— Comeremos rápido, lo prometo—tomo mi mano llevándome fuera de la habitación—

Llegamos a la cocina, la cual estaba vacía, tal vez era porque casi ya pasaban de las 11 de la noche, Donghae habrío la heladera y de allí saco queso, jamón, lechuga, tomate y algunos aderezos, busco en la alacena un poco de pan y con rapidez comenzó a preparar unos sándwiches. En cuanto termino puso cada sándwich en un plato individual y me ofreció uno de ellos.

— Poco aderezo como a ti te gusta...—me quede observándolo por varios minutos, el tomo su sándwich y comenzó a devorarlo con rapidez, llenaba su boca sin antes haber ingerido lo que ya tenía en su boca— ¿Qué pasa? ¿Por qué no comes?—pregunto con su boca llena de comida, me eche a reír y di un mordisco a mi sándwich, estaba muy bueno, con la cantidad justa de lo que contenía, habría esperado todo menos que el recordara esos pequeños detalles que lo eran todo— ¿está bueno?

— Delicioso—reí llenando mi boca al igual que el intentando imitarlo, los dos nos echamos reír, por lo que casi nos ahogamos, Donghae abrió nuevamente la heladera y extrajo de allí dos latas de Coca-cola y me dio una—gracias...

— De nada...—se encogió de hombros y ambos continuamos comiendo—

— Tengo que irme—tome lo último que me quedaba de mi bebida—gracias por la comida, tenía mucha hambre...