Cruel temptation.

Capítulo 13

" Don't need permission
Made my decision to test my limits. "

Desperté con unos suaves besos en mi espalda desnuda, abrí los ojos con pesar para sonreír solo un poco debido a las caricias.

—despierta...—su voz ronca me hizo dar un pequeño brinco.

—estoy despierto...—dije con voz soñolienta.

Él siguió besando libremente la curvatura de mi espalda, a veces dejando algunas mordidas en su paso, me gustaba la atención que él me daba y creo que me estaba comenzando a acostumbrar a ello.

Detuvo sus besos en la parte baja de mi espalda mordiendo juguetonamente uno de mis glúteos sacándome un jadeo por la sorpresa.

—vamos arriba.

—no...—me quejé—mejor sigue besándome me está ayudando a dormir—dije mientras me volvía a acomodar entre las sabanas de seda y él rió.

—bueno al menos ya se como hacerte dormir más temprano —suspiró.—son las diez... ya deberíamos estar fuera de la cama. —gruñí y me volteé hacia él.

—bien, si no me vas a dejar dormir al menos bésame más seguido de esa forma —reí sin perder el contacto visual.

—como que he escuchado eso antes—rodó sus ojos.

Se acercó a mí para darme un pequeño beso y levantarse finalmente conmigo siguiéndole los talones.

Me dirigí a su baño y cepillé mis dientes, él se había tomado la molestia de traer mis cosas a su habitación que creo que ahora es mía también.

Me cambie de ropa y yo bajé primero con él siguiéndome y lo primero que vi fue esa cabellera anaranjada horrible sentada en los muebles de la mansión, fruncí el ceño.

—¡yoongi! ¡Tú abuelita vino de visita! —avisé para bajar todas las escaleras.

—mocoso de mierda, ¿no puedes mantener tu boca cerrada cierto? —atacó.

—¿qué? Solo le estoy avisando que tú estás aquí—rodé los ojos.

—ya estoy aquí ¿qué pasa? —yoongi apareció con su mirada cansada.

—solo vine a darte información sobre los poderes del norte cuando esta sabandija apareció en mi camino—me clavó la mirada como si quisiera traspasarme con miles de cuchillos.

Me dediqué a ignorarla y tomar una bolsa pequeña de mi pertenencia que se me había quedado en la sala.

—vamos, Jimin no lo decía en serio —yoongi apaciguó—solo está ansioso por el trabajo.

—Jiminie... necesito que me acompañes a hacer unas cosas ¿puedes? —Taehyung me llamó desde la entrada de la puerta, miré a yoongi quien me daba la autorización de abandonar la sala, es mi jefe después de todo.

—esta bien ya voy —accedí.

—ahora entiendo a lo que te refieres con ansioso—la miré con una sonrisa sarcástica—es un novato, cualquier "pequeña acción" lo impresiona —rió.

—samara ¿podrías hacerme un favor? —ella miró a yoongi y asintió sin quitar la sonrisa soberbia de sus labios.—mete tu poca y miserable dignidad en esta bolsa y que sea para llevar, por favor—señalé la pequeña bolsita que estaba entre mis dedos.—no tengo tiempo para gastar con personas como tú.—su sonrisa se esfumó.

—Jimin... Taehyung te está esperando —yoongi fue el siguiente en hablar.

—sí no te preocupes, yo me iré —sonreí y me acerqué a él para besar sus labios con cierta dedicación.—y... quería agradecerte lo de esta mañana, me ha encantado —la miré de reojo, estaba muy molesta, mordí su mandíbula de una forma sensual haciendo que se escape en suspiro de sus labios.—nos vemos después —sonreí para samara está vez.