Cruel temptation.

Capítulo 17

" Who'd a thought we could be lovers?. "

Yoongi apareció nuevamente en el umbral de la habitación, seguí sus movimientos con mi mirada, él solo se acomodó en la cama a mi lado.

—¿pasó algo más? —pregunté.

—no, solo cosas tontas de hoseok —rió, asentí y reposé mi cabeza en el respaldo de la cama.

—¿crees que debamos preocuparnos por el intruso?—pregunté.

—no Jimin, como él hemos tenido muchos no es nada que yo no pueda manejar —tranquilizó.—vuelve a dormir, haré unas investigaciones mientras tanto.

—no quiero dormir —me opuse a la idea.—puedo ayudarte.

—no, trabajo solo y ya sabes cómo odio que no me obedezcas —dijo molesto.

—sí y ya sabes cómo odio cuando me das órdenes—repuse.—¿no puedes dejar de ser tan mandon al menos una vez en la vida?

—¿y tú no puedes dejar de ser tan terco una vez en la vida? —negó.—no tengo ánimos para tus berrinches de infante, debo trabajar.—Me levanté de la cama y me dirigí al baño a cambiar mi ropa.—¿a dónde vas? —me preguntó al salir.

—creo que no es de tu jodida incumbencia —solté molesto.

—mierda ¿cuándo vas a entender que no me gusta que digas malas palabras? —dijo molesto.

—¿y tú cuando vas a entender que odio que me digas infante? —encaré molesto.

—ya vas a empezar —bufó.—solo te pido una cosa y haces tanto drama para no cumplirla.

—no me gusta tu control sobre mí —caminé por la habitación.— ¡estás mal si crees que te voy a obedecer todo el tiempo! Si crees que te necesito estás jodido.

—¡soy tu maldito superior! Vas a tener que hacer lo que te digo, te guste o no —se levantó de la cama.

—me das mareo, aléjate ya —empujé.

—¿qué? —preguntó mientras me apresaba en sus brazos.— ¿ahora te doy mareo? —rió en mi cuello.—aunque quieras que me aleje sabes que realmente no lo dices en serio —canturreó en mi oído, cerré mis ojos y dejé de luchar contra él por un segundo para sonreír.

—¿quieres jugar entonces? —mordí sus labios con lentitud.

—oh angelito, nunca me molestaría jugar contigo—aspiró el aroma que emanaba mi cuello, reí para posar ambos brazos alrededor de su cuello.

—¿no crees que es algo tentador? —pregunté.—hagas lo que hagas, digas lo que digas... igual regresas a mis brazos como un perrito a su amo.

—me gusta más que tú seas el perrito mientras te doy tan fuerte como te gusta —mordió mi mandíbula para bajar sus besos a mi cuello.— ¿no quieres eso angelito? ¿No quieres que te joda tan fuerte hasta que les hagas saber a todos que eres de mi pertenencia? —gemí en respuesta.—¿no quieres que me entierre tan duro en ti hasta que te haga perder la razón y te de justo como te gusta? —aprisionó mis labios con los suyos en un beso brusco.—¿no quieres que te haga gemir tan fuerte mi nombre para que todos sepan que lo estamos haciendo?

Cerré mis ojos y me deje llevar por sus caricias que iban hacia otro nivel... podía sentir como todo mi cuerpo temblaba entre sus brazos.

—¿no quieres dejarme marcado para que samara sepa que yo te pertenezco? —rugió.—¿no quieres abrirte para mí para poder tomarte en todos los escenarios que se nos sean posible? Porque te encanta... te encanta ser sometido por mi, te encanta que te golpeé ese hermoso monumento que cargas... te encanta que te asfixie mientras hago rudas embestidas que ni el lubricante puede ayudarte.. te gusta eso ¿verdad?.