2

985 47 9
                                    

-Oh... Tiene que estar jugando-. Exclamó uno de ellos con la piel blanca y cabellos negros. Parecía un personaje salido de Crepúsculo

-No... por desgracia no lo hago-. Me incorporé alejando a el hombre con barba de mí

-No lo puedo creer... ¿Los vampiros existen?-. Preguntó el moreno de cabellos castaños

-No lo puedo creer... ¿Los hombres lobo son reales?-. Me puse de pie sacudiendo mi ropa ante lo qué todos me miraron y el chico de piel blanca asintió

-Yo sí entendí el sarcasmo

-Callate Stiles!-. Gritaron todos al unísono

-¿Estás huyendo de una mujer llamada Monroe?-. Preguntó una chica pelirroja de labios muy gruesos y yo la encare

-¿Dirige un aquelarre de brujos?

-No...-. Murmuró

-Entonces, no. Y de verdad ya me tengo qué ir-. Me encontraba tan desorientada, mis piernas temblaban y no podía caminar bien. La situación era tan incómoda pues ellos analizaban cada paso que daba y sentía que en cualquier momento iba a caer 

-Te van a asesinar-. Farfullo el ojí verde con barba 

-Ya lo hicieron dos veces y e sido la perfecta candidata para ser sacrificada en un ritual satánico así que ya lo superé

-¿Dices que ya estuviste muerta?-. Se acerco con gran fascinación el chico de  cabellos castaños 

-¿No es obvio? Vengo del infierno y necesito regresar a matar a los imbéciles qué me enviaron

-Vaya. ¿De verdad estamos creyendo esto?-. Farfullo el chico de piel blanca

-Sólo salgan de mi camino, ¿Sí? No tengo tiempo para idioteces-. Avance intentando adquirir nuevamente mi velocidad cómo vampiro, pero, había algo mal, puesto que no podía correr tan rápido cómo antes

-Si quieres te llevamos-. Continúo el chico de piel morena y ojos castaños, me sentía desorientada, no tenía idea de en dónde estaba y definitivamente necesitaba llegar con los Mikaelson
Me di la media vuelta y apreté el labio, enfocando con mis ojos a los 3 chicos y dos mujeres frente a mí

-¿Conocen New Orleans?

Katherine entró a la habitación y se acostó en mi cama, tenía que simular perfectamente ser yo y tal vez había ganado a Klaus y Elijah, pero ignoraba completamente que su hermana era una bruja bastante poderosa y que podía descubrir la realidad sobre mi paradero. Para ello, antes de qué se dieran cuenta, tendría que irse y asegurarse de qué no la volvieran a buscar.
Es decir, mí.
Katherine tenía otros planes conmigo, sobre todo al darse cuenta de qué sali del infierno y qué estaba lidiando sin saber bien con lo qué me hizo

Quedaba poco tiempo, tenía una gran necesidad de alimentarme y tal vez esa era la razón por la cuál no podía correr rápido ni hipnotizar, así que le pedí al chico que conducía el patético jett, qué lo detuviera

-¿Y ahora por qué?-. Frenó bruscamente y se viró .- ¿Quieres detenerte a hacer del baño? Ó, espera... ¿Los vampiros van al baño?

Rodé los ojos, estaba encerrada con una bola de inadaptados

-No, pero si comemos y nos encanta la carne joven y pálida cuyo tipo de sangre es A negativo

Él quedo boquiabierto y titubeo

-¿Cómo supiste qué era A negativo?

-Sólo lo adivine-. Levanté una ceja y el otro chico se dirigió a mí

-Oye, hable en serio cuándo te dije que nos estábamos escondiendo de una mujer, una cazadora y debemos tener cuidado

-¿En serio le temen a una cazadora? Dios, no han visto nada-. Suspire burlescamente

-Y por eso mismo tú nos hablarás de tu especie-. Exclamó enojado el hombre de barba y ojos verdes

Me obligue a guardar la calma, no sabia lo qué habría pasado con los Mikaelson y ahora tenia que darle explicaciones a un montón de imbéciles

-¿Qué quieren qué les diga? ¿No es obvio? Nos alimentamos de sangre humana, Somos muy poderosos, ágiles, veloces y la especie predominante...

-¿Las personas están al tanto de ustedes?-. Preguntó la pelirroja

-Unas cuántas... la mayoría se mueren-. Asentí

-Lo qué ella pregunta es sí hay alguien de quién huyan-. Rodó los ojos el chico tras el volante. Él parecía humano

-Demasiados y mucho más poderosos qué una estúpida cazadora-. Sonreí

-Si tu especie es la predominante y más poderosa cómo decías, ¿Cómo es que lograron matarte?-. Preguntó nuevamente el hombre

-La pregunta es, cómo escapé de la muerte después de lanzarme al fuego

-Oh dios mío, ésta mujer esta loca-. El chico de piel pálida volvió a poner sus manos tras el volante y arrancó. Yo miraba cómo nos alejábamos tras la ventana y en mi mente idealizaba mi venganza.

Katherine acomodó la hoja en mi cama y suspiró. Aún tenía pendientes así que salió lo más rápido posible cuándo Klaus la detuvo

-Katherina, ¿Ya te vas? Aún no te presentó al resto de mi familia...

Ella intento correr hacía el otro lado pero se topó con Elijah el cuál la estampó contra la pared

-¿Qué hiciste con Mía?-. Rugió furioso y Klaus la tomó por detrás, impidiéndole correr

-Elijah, así qué tampoco me superaste y buscaste un rostro igual al mío, sólo que con un par de ojos azules...

-¿En dónde está ella?

-La buena noticia es qué reina en su propio infierno. La mala, es qué no va a regresar

La Última Salvatore IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora