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Comenzaba nuevamente la semana.
Y como es costumbre durante toda la semana, la irritante alarma del celular suena. Shawn quien se encontraba acostado boca abajo busca su celular con la mano aún con los ojos cerrados. Cuando tiene el apartado en su mano lo lleva a unos centímetros de su rostro dándole fin a aquel sonido.
Se toma unos segundos en su posición antes de poder sentarse. Pasa ambas manos sobre sus ojos y extiende sus manos hacia arriba soltando un quejido. Estirando su cuerpo.
Examina uno de sus zapatos antes de salir de la cama. Cierra y abre los ojos para poder acoplarse a su realidad. Perezosamente se coloca sus pantuflas para tomar rumbo al baño pero detiene su caminar frente su ventana cuando ve la cortina de Lucy abierta ocasionando que la recamara de su amiga se observara.
Lucy se encontraba completando su rutina de mañana mientras Shawn observaba cada movimiento desde su ventana; Shawn siempre creyó que Lucy era una chica realmente hermosa. Era el prototipo de chica que todos deseaban, todos con excepción de él.
La rubia le es imposible no sentir una mirada puesta en ella por lo que lleva su vista hasta la ventana encontrándose con su amigo. Shawn agita su mano en forma de saludo mientras que Lucy solo le regala una sonrisa cerrando la cortina de su habitación.
― Lucy Miller, no te merezco ―susurra dando un ligero movimiento con su cabeza. Cierra de igual manera la cortina y toma rumbo nuevamente hasta el baño para poder tomar una ducha.
Minutos después sale del baño con una toalla enredada en sus caderas mientras seca su cabello con ayuda de sus manos. Se dirige al cajón donde saca unos bóxer Calvin Klein color blanco.
Como siguiente parada, se dirige al armario donde toma su molesto uniforme de todos los lunes. Al abrir su armario, unas bragas color rosa pastel llaman su atención, tenía que ser más cuidadoso con las prendas que dejaba Sophia. Toma la prenda escondiéndola debajo de un par de cajas que se encontraban arriba del armario.
Nuevamente se concentra en su actividad principal sacando su uniforme y llevándolo hasta la cama extendiéndolo. Estaba por colocarse el pantalón cuando su celular suena indicando que tiene una llamada entrante.
El nombre de Lucy es alumbrado en la pantalla. Desliza su dedo por la pantalla aceptando la llamada colocándole en altavoz para así no demorar más tiempo.
― ¿Ya te casándote de acosarme? ―se escucha del otro lado de la llamada.
― Loca, no te estaba acosando.
― Según las películas, cuando una persona te observa fijamente desde un lugar lejano se les llama acosadores.
― Para nuestra suerte, no estamos en una película, ―Lucy ríe del otro lado de la línea― yo solo contemplaba la vista que la vida me regalo esta mañana.
