Orgullo y tradición - Capítulo 6

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Capítulo 6


Una noche de primavera, el príncipe de la raza guerrera se disponía a tomar un aperitivo improvisado, había estado entrenando hasta más tarde de lo habitual, emocionado por una nueva técnica que después de mucho esfuerzo lograba dominar. Hasta que su estómago rugió casi en una súplica por algo de comida. Así que ahí se encontraba a deshoras buscando alimento.

Caminaba a paso lento, desenfadado, cuando de pronto escuchó voces, sin tener ningún motivo detuvo sus pasos y se pegó a la pared para escuchar, aunque lo que hacía en esos momentos era espiar, actitud indigna para él, tenía el presentimiento que debía hacerlo.

-¿Estás seguro Shu?

-Sí, era él, estoy seguro que me reconoció. Le impresionó mucho verme igual que hace años.

-Pero si hay muchos otros... perros parlantes, podría ser cualquiera.

-Siendo realistas, cada vez somos menos, no tengo idea a que se debe, pero cada vez hay más humanos y menos de otras... razas por así decirlo. ¿No lo ha notado con el paso del tiempo?

-Bueno, pensándolo bien tienes razón- rascó su cabeza Pilaf, -es que los de raza humana se la pasan... ya sabes... por cualquier razón, en cambio los demás solo cuando es necesario. De hecho no recuerdo muchas o ninguna hembra de tu raza.

-Siempre han nacido en su mayoría machos. Creo que a ese paso nos extinguiremos pronto.

Ambos dieron un largo suspiro de resignación.

-Volviendo a lo anterior, le insistí que no era yo quien él aseguraba.

-¿Y te creyó?

-Creo que sí, pero tal vez se quedó con la duda.

-¿Qué más dijo?

-Preguntó por Mai y por usted.

-¿Después de tantos años nos recuerda?

-Y cómo no. Recuerde que lo dejamos sin esa pestilente casa móvil. Me preguntó que cómo le había hecho para no envejecer en más de treinta años. Fue entonces, cuando aproveché que pasaban muchas personas y corrí de ahí, debido que Hakoru es un viejo, no pudo correr tras de mí.

-¿Qué hará por aquí? El solía vagar cerca de ciudad Satán.

-Recuerde que era un estafador, es posible que se cambiara de zona en diversas ocasiones.

-Sí, es posible. ¿Se lo piensas contar a Mai?

-No sé, él la trató muy mal en ese entonces, no quiero traerle malos recuerdos ahora que está tranquila y que han pasado décadas.

Vegeta continuaba escuchando cada palabra sin comprender a lo que se referían.

"¿Décadas? Pero si esos mocosos tienen casi la misma edad que Trunks. Tal vez lo dijo como una simple referencia al tiempo que ha pasado. ¿Quién es ese tal Hakoru y qué relación tiene con la mujercita? Tal vez sus padres la maltrataban de niña... Aunque dijeron que fueron criados en sus primeros años por una mujer a la que catalogaron de amable. A menos que, antes de eso Mai haya escapado de una situación de violencia intrafamiliar. Sin embargo, es muy extraño todo esto" Vegeta decidió salir de su escondite y hacer acto de presencia en la cocina.

Al verlo entrar, los presentes cortaron de tajo su conversación, lo que pareció aún más extraño al guerrero, quien pasó de largo y tomó lo que necesitaba del refrigerador, para después salir de la cocina con sus bocadillos en una bandeja, no sin antes detener sus pasos para hacer un comentario.

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