Orgullo y tradición

Orgullo y tradición - Capítulo 11

Capítulo 11

La intrépida científica se movía de un lado a otro con premura, dando órdenes a las personas contratadas para preparar el festín que se llevaría a cabo esa misma tarde, en las instalaciones del enorme jardín de Capsule Corp.

-Aquí van las bandejas de ensalada- señaló Bulma a la cocinera que empujaba un carrito lleno de bandejas. -Y por aquí, sobre esas mesas van los postres.

-¡Wow mamá! Parece que alimentaras a un regimiento- sorprendida Bra miraba el desfile de cocineros llegando con bandejas, llenas de diversos platillos, todos con apariencia suculenta.

-No es para menos. Tu padre y hermano al fin llegan hoy. Trunks nunca se había alejado del planeta por más de una semana. Tengo ya seis meses sin ver a mi niño.

-Supongo que Bills y Wiss vienen a la comida.

-Sí, tengo que agasajarlos. Es probable que Vegeta y Trunks extrañen la comida de la tierra.

-¿Y en cuánto tiempo llegaran?

-Ayer que Wiss se comunicó, me dijo que llegaban poco antes del atardecer, justo a tiempo para la última comida del día.

-Entonces, como en una hora aproximadamente- dijo mirando su reloj de pulsera. -Conociendo al engreído de mi hermano, es probable que regrese presumiendo sus nuevas habilidades.

-No creo que tenga mucho tiempo para presunciones. Debe ponerse al corriente en su oficina, se me cargó todo el trabajo a mí con él fuera de la tierra, lo necesito con urgencia al frente de la compañía o enloqueceré.

-Si vuelve a abandonar sus entrenamientos por el trabajo, lo más probable es que mi padre se lo lleve todo un año entero para evitar que se convierta en un pusilánime.

-¡Bra! ¿Qué son esas palabras?- le llamó la atención a su hija.

-Eso dijo papá antes de llevárselo.

-Vegeta y su bocota.

-Tú dices cosas peores mamá.

-¡Pero no por eso tienes que repetirlas!

-Trunks habla igual y no lo regañas.

-Él es adulto... y un cabezota al igual que su padre. Respecto a llevárselo de nuevo, yo me encargaré del testarudo de Vegeta-. Contestó Bulma con tono resignado. Justo en ese momento, Bra percibió las energías de los invitados a la cena.

-¡Ya vienen mamá!- le avisó sonriendo y apuntando con su dedo a un punto en el cielo.

A lo lejos se observó una nave acercarse. Gohan la tripulaba, a su lado Videl fungía de copiloto, el resto de la familia platicaba en los cómodos sillones del nuevo medio de transporte del matrimonio Son Satán.

-Hijo, tu nueva nave es perfecta para pasear en familia, ya te hacía falta una nave así- comentó entusiasmada Milk.

-Es lo mismo que pensé madre. Pero todo el crédito es para Mister Satán, fue un regalo para Videl.

-Sigo pensando que fue mucho. Se ve realmente costosa, no te hubieras molestado papá.

-Ni lo digas Videl. Eres mi única hija, si quiero gasta mi dinero en ustedes, sabes que me hace feliz hacerlo.

-Por cierto Pan... ¡Te vez hermosa vestida así! ¿Dónde quedó mi muchachito revoltoso?

-¡Hay abuelo Satán! Aquí estoy, sigo siendo yo.