Orgullo y tradición

Orgullo y tradición - Epílogo Parte I

Epílogo Parte I

La joven guerrera se observaba con preocupación frente al espejo.

-Mi vestido apenas tapa las marcas rojas en mi pecho- se quejó Pan ajustando su vestido.

-Creo que se me pasó la mano... lo siento- se disculpó acercándose a ella, viéndola a través del espejo. Con su pulgar delineó el contorno del escote, en una casi imperceptible caricia. Pan levantó la cabeza hacia atrás disfrutando de la electrizante sensación que le causaba la caricia del guerrero en su piel, justo en ese momento sonó en celular de la joven.

Pan corrió hacia la cocina por su celular para atender la llamada, seguida por un contrariado Trunks.

-¡¿Papá?!... ahh sí. Sí... de acuerdo... no hay problema- la joven mostró cara de preocupación y al instante colgó la llamada.

-¿Era Gohan?- inquirió recargado en el marco de la puerta vistiendo únicamente sus boxers, con sus lilas cabellos sueltos cayendo hasta sus hombros.

-Sí... y viene hacia acá... dijo que tarda diez minutos en llegar- respondió Pan con obvio nerviosismo.

El híbrido se negaba a creer lo que su joven mujer había dicho, Gohan, en camino hacia su penthouse, justo después de lo que sucedió entre él y su hija.

-Dijo que se enteró por mi madre que hoy vendría a ayudarle a Mai a prepararte una comida... yo... yo no sabía que terminaríamos en tu cama, por eso antes de salir de casa dije que estaría aquí- respondió mordiendo sus labios con nerviosismo.

-¿Pero por qué vendría Gohan desde la montaña Paoz, será que sospecha algo?

-Lo dudo. Sucede que acaba de salir de un congreso que dio esta tarde aquí, en ésta ciudad y me preguntó si podía pasar por mí... ¿hice mal en afirmarle?- se llevó las manos a la cabeza. -Debí haber dicho que no, me tomó por sorpresa... Trunks he metido la pata, me va a matar.

-A quien va a matar es a mí.

El guerrero se acercó y la tomó por los hombros. -No te preocupes Pan, es poco probable que sospeche, y en muy poco tiempo dejaremos de escondernos. Mientras tanto, voy a vestirme para que no me encuentre así- señaló sus calzoncillos y corrió a su habitación a vestirse con ropa casual.

Pan retocó su maquillaje en tiempo record y acomodó su cabello hasta quedar tal y como había llegado. Justo pasaron los diez minutos y el timbre de la puerta sonó, el ki familiar y tranquilo de Gohan se sintió del otro lado de la puerta.

El híbrido hizo un hondo suspiro calmándose y abrió la puerta. -Pasa Gohan, que gusto verte- lo recibió un sonriente Trunks, vestido con la primer pantalonera color negra y playera del mismo color que encontró, y su cabello recogido en una improvisada coleta.

-Gracias Trunks, espero no causar molestias, solo vengo por Pan-. Entró a recibidor con su amabilidad tan característica de él. -Imagino que ya terminó de ayudar a Mai... Mmmm huele a pastel de carne.

-Sí. ¿Gustas?- rascó su cabeza en un gesto de nerviosismo.

-No gracias, Videl me llamó para decirme que ella y mi madre prepararon el estofado especial de la montaña Paoz- lo nombró con orgullo. -Por eso vengo por Pan, para irnos juntos.

Sin nada que decir, Trunks se limitó a sonreír tontamente.

-Por cierto Trunks... ya me contó Goten lo de tu compromiso con Mai. ¡Felicidades! ¿Por eso era la comida?- buscó con la cabeza a la supuesta novia del empresario, pero solo vio a su hija con bolsa en mano acercándose a ellos.