Para siempre. {Noah Centineo}

13. AM: parte 2

—No es cierto.—abrí mi boca algo asombrada, bajé del auto gracias a Noah que había abierto mi puerta y sentí que mis lágrimas inundaban mis ojos.—Todavía existe.—parpadeé un par de veces para que las lágrimas se fueran, no quería comenzar a llorar, una porque estaba frente a Noah, y otra porque mi maquillaje estaba perfecto—Lo recordaste.—incrédula lo observé y el me mostró una amplia sonrisa.

—Nunca olvidaré nuestra primera cita.—una sonrisa nostálgica apareció en su rostro.—¿Vamos?.—me ofreció su mano y yo la tomé, como la primera vez.

Flashback.

—Acepta venir conmigo.—Noah suplicó y yo rodé los ojos por enésima vez.

—¿Nunca vas a cansarte Centineo?—pregunté exasperada y metí los libros en mi casillero.

—Por favor...—hizo un puchero con sus labios y yo solté una pequeña risita inocente.

—¿Si acepto me dejarás en paz?—hice una pequeña mueca, a penas tenía 14 años y este
chico no dejaba de insistirme que saliéramos, no creía que mi padre me dejara.

—Si.—sonrió ampliamente y yo resignada solo asenti con la cabeza.—No te vas a arrepentir.

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—Wow, te ves hermosa.—Noah me sonrió y yo mostré una pequeña sonrisa tímida, era mi primera cita, mi padre se encontraba a escasos centímetros de nosotros escaneando la escena, los celos se le notaban a kilómetros, no quería darme permiso para esta salida, acepto con la condición de que el iba a vigilarnos de lejos. Durante el trayecto Noah y yo platicamos un poco, al llegar observé el lugar algo nerviosa y sonreí por un momento.

—Me gusta este lugar.—admití con una pequeña sonrisa ya que me daba algo de vergüenza mostrar mis braquets.

—¿Vamos?—me extendió su mano y yo lo miré dudosa por unos segundos e inconscientemente y con todos los sentimientos a flor de piel, tomé su mano.

Fin flashback.

Caminamos hacia el lugar y Noah saludó a unas cuantas personas que conocía; yo por mi parte me encontraba observando el lugar, era precioso y todo estaba Justo como antes. Noah me guío hacia una mesa y yo sentí un grito atascado en mi garganta; era la misma mesa en la que habíamos comido la primera vez.

—Recuerdo todo.—se dio cuenta de mi expresion de nostalgia y el se sentó frente a mi.—Recuerdo que ese día me la pase toda la noche repasando las pláticas que habíamos tenido. Desde ese día me enamoré de ti.—mis mejillas se encendieron y el ritmo de mi corazón se aceleró. Si estaba tratando de reconquistarme lo estaba logrando.

—Tantos recuerdos...—el mesero llegó con los menús y nos lo dejó sobre la mesa después de haberse presentado. A los minutos ambos ya habíamos pedido nuestra comida, Noah pidió un pescado al vapor y yo me decidí por una pasta bolognesa.—Noah.—traté de llamar su atención y de inmediato se giró a verme.—Me dijiste que estudiabas actuación.—recordé a lo cual el contestó asintiendo con la cabeza.—¿Has audicionado para algún papel?—pregunté curiosa y el recargo sus antebrazos en la mesa.

—Si, de hecho ya e interpretado unos cuantos.—sonrió orgulloso y abrí mis ojos algo sorprendida.

—¿Enserio?—mi boca se abrió formando una "O"

—Si, estuve en Austin y Ally, una serie de Disney.—ahogue un grito cosa que lo hizo reir.

—No bromees conmigo Noah.—lo mire perpleja y el ladeó su cabeza junto con una sonrisa

—No bromeó muñeca.—vi sus ojos llenos de sinceridad y por un momento quise gritar y abrazarlo, pero dado el lugar en el que nos encontrábamos sabía que no iba a ser muy propio de mi parte.

—Wow Noah, no lo puedo creer, felicidades.—tomé su mano por encima de la mesa y le di un pequeño apretón, realmente me sentía muy feliz por el, desde pequeño había sido su sueño ser actor y a decir verdad también me sentía un poco celosa, las chicas de seguro babeaban por el cuando lo veían en la televisión, pero bueno, desventajas de haber salido con un actor.

—¿Si conoces Austin y Ally?—Noah alzó una ceja y tomó un poco del vino que había pedido. Por un momento me sentí tonta, había escuchado vagamente sobre esa serie pero realmente nunca la había visto, no se que hubiera pasado si años atrás yo hubiera encendido la tele y hubiera visto a Noah en ella, probablemente hubiera entrado en depresión.

—Sinceramente... no.—hice un puchero.—Pero creo que Natan lo ha visto, no se, el nombre se me hace muy familiar.—el sonrió y asintió con la cabeza.

—Hace poco audicione para dos papeles, uno en una nueva serie que se llama The Fosters.—sonrió emocionado y su sonrisa me contagió.

—¿Te han llamado?—pregunté esperanzada, sus logros me hacían muy feliz, Noah merecía mucho éxito por su gran esfuerzo, a parte porque era muy carismático y talentoso.

—Aún no, me dijeron que para finales de este mes obtendría respuesta.—la comida llegó y yo asentí con la cabeza en forma de agradecimiento.

La comida pasó entre risas, bromas y muchos recuerdos, la manera en la que Noah me observaba me ponía nerviosa y los pelos de punta, sus ojos cafés me hipnotizaban y la manera en la que despeinaba su cabello mientras hablaba me volvía completamente loca, todo el me volvía loca.

—¿Te parece si vamos a caminar?—preguntó con una pequeña sonrisa cuando ya estábamos dentro de su Jeep.—Sirve que bajamos la comida y hacemos tiempo.—rio un poco y yo solté una carcajada, esa era nuestra excusa siempre: "bajar la comida", una forma excusa pero nos gustaba darla cuando queríamos pasar más tiempo juntos y no queríamos sentirnos mal al llegar un poco más tarde a casa.

Noah estacionó a las orillas de donde comenzaba la arena Del Mar y ambos bajamos del auto. Solté una risita divertida debido a que nuestras vestimentas no eran nada apropiadas como para andar en el mar pero ambos sabíamos que una caminata nos vendría bien a ambos.

Desde pequeños hacíamos largas caminatas, en donde nos contábamos nuestros secretos, problemas, alegrías y tristezas y nos escuchábamos el uno al otro, nos sentíamos llenos.

—Pensé que iba a ser buena idea venir a la playa.—alzó sus hombros de manera graciosa y yo solté una risita mientras desabrochaba las correas de mis tacones, al ya tenerlos en mis manos esperé a que Noah se quitará sus zapatos juntos a sus calcetines y observé cómo subía su pantalón hasta su rodilla.

—Fue una buena idea Noah. Este es nuestro lugar.—sonreí con los labios apretados y hundí mis pies en la arena; caminé lentamente hasta la orilla, podía sentir la brisa del mar en mi rostro y las olas caer sobre mis pies.

—Definitivamente, este es nuestro lugar.—observó a lo lejos y yo mostré una gran sonrisa.

Sin lugar a duda, mi lugar era él.

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Chicas, aquí les dejo el capítulo 13, espero y les guste mucho. Si me dejan muchos votos y comentarios en esta novela y en mi nuevo fanfic "Anna" tomare en cuenta hacer maratón este fin de semana 👀♥️
¡Muchas gracias por leer!