Capítulo 12

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Mis ojos se abren lentamente. No sé que ha pasado, he perdido el conocimiento.

Estoy en una cama de hospital, y me duele mucho la cabeza. Mi mano se posa temblorosa en mi vientre, y siento una mano junta a la mía. No puede ser.

- Nuestro hijo está bien, tranquila

Observo a Christian, el pequeño Clay está sentado en sus piernas. Debe de querer mucho a Christian. Como bien dice, es su padre. El auténtico hijo de Christian, aún siendo adoptado, yo así lo creo.

- ¿Qué ha pasado? - Suspiro de alivio. Mi bebé está bien

- Ha pasado que no me has dicho que tu embarazo es de riesgo, y te empeñas en evitarme - Tiene razón. No sé que hacer ni que pensar

- No te evito, sólo hago lo que es mejor para los dos

No quiero destrozar la hermosísima pareja que forma con Elena. Nótese la ironía.

- ¿Lo que es mejor?, yo creo que lo que estás haciendo, es lo peor que puedes hacer

- No es verdad, sólo cuido de mi bebé, y no eres una buena opción para él

- ¿Por qué? - Me observa bastante ofendido

- Porque estas con otra, y no me lo dijiste, no puedes ir así por la vida, engañando a tu novia - Lo siento, me sale del alma

- ¿Mi novia?, ¿Que novia?, ¿Tu? - ¿Yo? ¿Es qué se ha vuelto loco?

- No, Elena - Me incorporo. Me frustra decir su nombre en alto

Elena es una hija de p×××, y no se merece tener a alguien como Christian.

Él reacciona riéndose, como si le acabara de contar un chiste

- Elena no es nadie, además, según las redes sociales y eso, si que somos pareja

- ¿No me digas? - Eso sí me preocupa. Los ataques de celos de Elena, pueden ser muy peligrosos

- Si, mira - Me entrega su móvil

Joder. Somos la pareja del momento, según Internet. Si hasta han creado fotos falsas de nosotros.

- Hay que parar esto, es evidente que ni estamos saliendo, ni tomamos helado juntos, ni salimos a bailar ni nada de esto es real - Le devuelvo su móvil

- No es real, porque no quieres, además, yo no puedo parar el rumor, cuando lo he difundido yo

- ¿Qué dices?, ¿como has podido? - Le miro incrédula

- Esto es la guerra Ana, el bebé que crece en tí es mi hijo, hermano del pequeño Clay, y quiero que todos se enteren - Abraza a su niño

Encima se cree que difundir rumores de que salimos, está bien. ¿Está mal de la cabeza?, ¿cómo puede hacer eso teniendo novia?

- ¿Y tú novia?, porque seguro que tiene que decir mucho al respecto - Ya me lo dijo a mí el primer día

- Elena no es mi novia, lo fuimos, pero ya no

- Vives con ella, que yo sepa, ¿cómo puedes ser así?

- Bueno, ya no me interesa, y no va a suponer un problema

¿Qué no va a suponer un problema? Que yo sepa, ya es un grave problema. Ayer por la noche me escribió un correo amenazante, que dan ganas de denunciar, pero es poderosa y no me serviría para nada

- ¿Puedo hacerte una pregunta?

- La vas a hacer igual - Christian siempre hace lo que le viene en gana

- ¿Por qué te preocupa tanto Elena?, es sólo una amiga inofensiva

¿Inofensiva?, eso lo dice porque no la ha visto las garras. Menuda es Elena, que hasta mandó a dos pringados a matarme, los que por suerte, no he vuelto a saber nada de ellos.

- Es tu pareja, respetala, y no la engañes

Cuando uno se compromete, es lo que tiene que hacer. Si hubiese querido algo conmigo, podría haberlo tenido, pero ni dejó a Elena, ni me siguió la pista, ni se despidió cuando se fue, así que es normal que ahora tenga mis serias dudas sobre sus aparentes buenas intenciones.

- ¿No crees que ya es tarde para eso? - Vuelve a posar su mano en mi vientre

Tengo la clara prueba de su engaño, su hijo, de 8 meses de gestación, algo que no puedo ocultar, porque es evidente. Cometí el error de decirlo en alto, y ahora pago las consecuencias.

- No es tarde, podemos hacer como si nada - Insisto

Me levanto de la cama, bajo la atenta mirada de Christian. Si fuese por él, no estaría fuera de la cama ahora mismo

- Yo no puedo Ana, quiero formar parte de la vida de mi hijo

- No quieres en verdad, tu lo que quieres es seguir con tu vida sin mí, y te lo permito, no hace falta que sigas con esta farsa

- No es ninguna farsa, la única razón por la que hago esto es porque quiero a nuestro hijo

- ¿Qué dices?, no es hijo tuyo, no, no lo es, esto no puede ser

- Ana, por favor, dame una oportunidad

- Yo...- Voy a contestar, pero justo entra Leila

- ¡Oh Dios mío, Ana! - Me abraza con tanta fuerza, que por un momento, creo que va a romperme

- ¡Sueltala! - Christian la aparta de mi. Eso ha estado fuera de lugar

- ¿Qué haces?, no tienes derecho a meterte en medio de nuestra preciosa amistad

¿Preciosa amistad? Es evidente que a la gente le falta un hervor. Me toman como ellos quieren

Ahora resulta que soy super amiga de Leila. Menuda amistad, también hay que decirlo, que da bastante miedo

También resulto ser la novia de Christian Grey, y como no, vamos a todos lados juntos, nos hacemos selfies a todas horas, y hasta hemos estado de cruzero juntos por el Caribe. Tengo una vida que ni yo recuerdo. Esto está de p*** madre, nótese la ironía. Mi vida según Internet, oye, pues mola más que mi realidad.

Ah, y por supuesto, también tengo un guardaespaldas, el cual ahora mismo, está entrando por la puerta.

- ¿Tú otra vez? - Se dirige a Christian

- ¿Tienes algún problema? - Christian no se anda con chiquitas esta vez

- Si - Como respuesta, Christian le saca el dedo corazón

Me aguanto la risa. Eso no me lo esperaba de un caballero como Christian Grey ¡oh la la! ¿como será en realidad el intimidante señor Grey?

- Escuchame, Señor Grey...- Christian no le deja terminar

- ¡Anda a la mierda joder!, ¡que eres muy pesado! - Se atreve a echarle de la habitación

- ¿Qué haces? - Pregunta Leila asombrada

- Justo iba a pedirte amablemente que salieras de aquí - Christian la invita a salir

¿Amablemente?, pues que amabilidad más extraña.

- ¿Cómo te atreves a invitarme a irme?

- No sé, porque no te aguanto, eres muy cansina - Otra que se va *por cuenta propia* de la habitación

- Christian - Aún sigo en shock

- Dime, pequeña

- ¿A qué no cuela si te invito a irte?




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