Un cuento no tan de Hadas - Peter Pan - OUAT[EN EDICIÓN]

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Peter's P.O.V

¿La guerra de Troya? Aquella en la cual se enfentaron a muerte los tan conocidos, Griegos y Troyanos; pero... eso que tenia que ver.

Según mis conocimientos, aquel libro de Prometeo encadenado trataba de como dicho personaje hurtaba el fuego para darselos a los mortales, por pura compación, sin embargo, por sus actos de bondadosos fue castigado por el dios del trueno, Zeus, el cual mando a encadenarlo para toda la eternidad, sufriendo una interminable agonia.

Se me hacia extraño, ya que, al final del libro de tragedia griega se encontraba el mapa de donde comenzo la más nombrada de las batallas y guerras en el mundo antiguo, la batalla de Troya.

- No lo entiendo.- hablé claro- la batalla de Troya surgió mucho despues de aparecer el mito de Prometeo encadenado, ¿porque deberia de estar relacionado?

Frances al igual que yo, no tenia una respuesta logica siquiera formada en su cabeza. Pero sin embargo, dio una opinon que me hizo abrir los ojos.

- No lo se, tal vez... Troya tenga algo que ver.- pausó para mirar atenta a aquella hoja bañada en oro- el mapa indica el punto en donde ocurrió el Juicio de Paris.

Me enderesé, para luego, arrebatarle el libro a Frances.

- ¡Hey!- exclamó sorpendida.

- Estamos a mano.- me justifique sin mirarla.

¡Eso era!, el juicio del tan Famoso principe perdido, Paris, ese era nuestro destino.

Cerré de golpé aquel libro de antaño para luego devolverselo a Frances y empezar a buscar el frasco extraño que encontré mientras me habia escabullido al castillo de mi no tan querido hijo, Rumpelstilskin.

- ¿Que sucedé, Peter?- preguntó con un tanto de temor.

Al encontrarlo lo miré con una sonrisa de oreja a oreja. Destapé aquel frasco para luego tomar aquella hoja de oro y meterla dentro.

- ¿Que haces?- preguntó ahora con duda.

No respondí a su pregunta, tenia tanto por pensar y hacer, que lo primero que se me ocurrió fue despertar a los demas de mala gana.

Felix, Colin y Marco se encontraban durmiendo plasidamente apoyando sus cabezas en el mismo tronco, a lo cual, use magia para elevar rapidamente aquel tronco.

Se levantaron adoloridos por el motivo de que su cabeza habia chocado contra el suelo muy fuerte mente, pero no demasiado como para morir, claro.

- ¡Hey!- exclamó Marco mientras se daba la vuelta y sobaba su cabeza.

- Levantense, tenemos un viaje que hacer.

Vi una vuelta rapidamente para tomar mis cosas.

- Peter ¿me vas a decir que planeas?- habló Frances siguiendome.