Confesiones

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Perrie no respondió nada; simplemente buscó su mano y entrelazó los dedos con los suyos. La había tocado de muchas maneras, pero aquélla, por lo que podía recordar, era la primera vez que simplemente la había agarrado de la mano. Sin más.

Jade tenía una personalidad tan fuerte y confiada que a veces Perrie olvidaba de lo femenina que era. Su mano de dedos finos y delicados, su palma suave, le recordó que, pese a su aire de arrogante y desenvuelto, era una mujer vulnerable. Más de lo que prefería que creyeran los demás.

—Probablemente a estas alturas me gustas ya demasiado —lo dijo como si acabara de admitir que le gustaban demasiado los bocadillos de nutella con plátano.

—Me gustaría poder entender por qué eso te parece algo tan malo.—

—Ya te dije que no quería nada serio.—

—¿Quién ha dicho que el hecho de que nos gustemos mutuamente sea sinónimo de matrimonio?—

Jade se detuvo en seco, pero no retiró la mano. Ladeando la cabeza para observarla, se subió las gafas de sol como si quisiera asegurarse de que comprendiera lo que estaba a punto de decirle. Perrie hizo lo mismo, y le leyó la confusión en sus ojos castaños.

—Te lo diré de una vez: por lo que se refiere a los hombres y a las relaciones, soy un veneno puro. El Mal en persona.—

Perrie no se rió, consciente de que estaba hablando completamente en serio. Realmente creía en lo que acababa de decirle.

—¿Por qué dices eso?—

—Porque no lo digo yo, me lo han dicho. Rompo corazones y hago daño a la gente, Perrie.—

—¿De manera intencionada?—Frunciendo el ceño con gesto confuso, sacudió lentamente la cabeza.

—No, supongo que no. ¿Pero qué diferencia supone eso?—

Inclinándose, Perrie le plantó un tierno beso en la frente. No tuvo nada sexual: solo ternura y algo de consuelo para aquella mujer hermosa que parecía verse a sí misma de una manera tan distinta a como ella la veía.

—Muchísima —murmuró Perrie.

—Desde luego no para los tipos cuyos corazones he roto.—

—Que habrán sido ejércitos, supongo. ¿O escuadrones más bien? —rodeándole los hombros con un brazo, la atrajo suavemente hacia su pecho—. ¿Pelotones?—

—No sé cuantos individuos son eso... —murmuró Jade contra su blusa, con voz algo llorosa, recargandose sin miramientos sobre los pechos de Perrie.

—Yo tampoco. Y, sinceramente, tampoco me importa. Además has dicho hombres, quizá esa sea la clave. Esta vez, es diferente porque yo soy mujer.—Perrie hablaba en serio. Era una mujer adulta y responsable. Podía cuidar de sí misma.

Solamente se preguntaba si Jade sería realmente tan dura e implacable como decía ser, o si todas aquellas precauciones y miedos no responderían más bien al objetivo de proteger su propio corazón, y no el de los demás. Sobre todo teniendo en cuenta que parecía haber bajado un tanto la guardia.

—Sigamos con esto —propuso ella—. No más reglas ni muros. Ya veremos a dónde nos lleva. ¿De acuerdo?—

Perrie no obtuvo respuesta. En su lugar, sigilosa, quedamente, sintió a Jade relajarse contra su pecho. Al cabo de unos momentos, incluso deslizó las manos por su cintura, abrazándola.

Permanecieron así durante un buen rato, al borde del agua, con las olas rompiendo en sus pies. Y en la absoluta serenidad de aquel momento, Perrie pudo sentir como la tensión la abandonaba, y cedía el autocontrol que tanto se había esforzado siempre por mantener. Hasta que finalmente murmuró:

—De acuerdo.—

Perrie no contestó ni reaccionó de ninguna manera, consciente de que había tomado una decisión especialmente difícil. Sabía que también que acababan de acordar algo que podía terminar mal o no funcionar.

Porque lo que estaba sucediendo entre ellas era algo imprevisible, tan incontrolable como las corrientes que enviaban aquellas olas a morir a sus pies. No sabía adónde iban ni cuánto tiempo tardarían en llegar. O cuánto tiempo se quedarían.

Simplemente se alegraba de que por fin Jade pareciera haberse decidido a seguir aquel viaje con ella.


¿Qué les va pareciendo la historia? ¿Todo va de viento en popa, no? ¿Demasiado perfecto? Inyectemos un poco de drama. Jajaja, los leo.

Paraíso al Descubierto || Jerrie +18✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora