Capítulo 27: ¡Ese es mi chico!

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-¡Francisco! Te pregunté algo.-advirtió mi mamá.

-¡Uuu Franky está en grandes problemas!-dijo Manuel. ¡Argh le doy las gracias mentalmente por decir lo obvio!

-M...mamá.- fue lo que logré decir durante mi estado de nervios.

-Francisco, tienes tres minutos, para explicar lo que acaba de pasar aquí y ustedes señoritas; ustedes son damas no un bonche de animales que pelean entre sí. - dijo mi querida madre indignada.

-H...hola.- dijeron las tres a la misma vez.

-Por lo menos tienen modales.- suspiró y después de dejar su cartera en la silla siguió con su sermón.- Ahora. ¿Ustedes no ven que pueden lastimar a Francisco por estar peleando en su cuarto?- dijo dirigiéndose a las chicas.

-Esto va a estar bueno.- dijo mi hermanito sentándose en el piso.

-Madre por favor. Aquí no.- le dije tapándome la cara con las manos. Estaba demasiado avergonzado.

- ¡Francisco! A mí tú no me dices qué decir.- esta vez me regañó a mí- Y ustedes no se van de aquí.- dijo señalándolas como si tuviera ojos en la espalda para ver que ellas trataban de escapar de este cuarto. No las culpo. Si yo pudiera caminar, también trataría de escapar.

-Lisette por favor; no hagas una escena. Vinimos a ver a nuestro hijo, no a regañarlo por estupideces.- vino a mi rescate; mi papá.

-¿Estupideces? Carlos por favor quédate fuera de esto.- le advirtió mi mamá.

-Lisette cálmate. Vete afuera con las chicas que yo hablo con Franky.-le dijo mi papá tranquilamente.

-¡A mi no me mandas! Pero me voy afuera con las chicas para que hables con nuestro hijo. Y que conste que lo hago porque quiero no porque me lo dijiste.- dijo indignada.

-Lo que tú digas amor.- dijo mi padre rodando los ojos.

-Vengan chicas.- y las tres la siguieron fuera del cuarto con la mirada en el piso.

*P.D.V. de Lisette*

-Okay.- dije arreglándome el pelo y examinando el rostro de todas. Una de ellas se me hizo muy familiar... ¡Ay como no! ¡Si es Paola!- ¿Paola? ¿Qué haces aquí? ¿Tú no ibas a una universidad lejos de esta? -dije realmente curiosa.

-S...sí p...pero decidí sorprender a Francisco, porque logré que me transfirieran a su universidad.- dijo realmente nerviosa. Hum qué raro... ¡Pero no importa qué emoción!

-¡Ay que bueno! ¡Así mi hijo puede volver contigo! Ay cariño ya te extrañaba en esta familia.- dije abrazándola con todas mis fuerzas y dándole un beso en el cachete. Una vez que me separé de ella continué hablando.- Okay y ahora... ¿Ustedes que pintan en todo esto? O sea por qué están aquí.

-B...bueno Lisette- empezó hablando Paola.- Como veras, Lauren es mi... mejor amiga; sí. Jejeje- dijo señalando a la pelinegra demasiado nerviosa.-

-Nena... ¿Y por qué los nervios? Aquí estamos en confianza. Y a usted mucho gusto.- le ofrecí mi mano y la tomó- ¿Y la otra? ¿Quién es?- dije mirándola de reojo.

-¡Ah claro! Ella es Marilyn, la enfermera que está atendiendo a Francisco.- dijo fingiendo una sonrisa, pero alegüas se notaba que era forzada.

-Mucho gusto. Bueno ya que conozco a las otras dos; por qué peleaban. Eso no es usual en un cuarto de hospital y menos en el de MI Francisco.- pregunté y todas se pusieron más pálidas que un papel.

-Estem...-dijo Paola

-Bueno...- dijo Lauren

-Como ves- dijo Marilyn

FranciscoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora