Tu Inteligencia

44 2 4
                                    

Lo sé.

Siempre que trato de explicarte algo me dejas continuar hasta terminar y decís:
lo sé.
Al principio me sorprendía la capacidad que tenías para razonarlo todo,
siempre un paso adelante y abierta a todas las posibilidades.
Al principio no sabía que tenías la capacidad de hablar de cualquier tema con fluidez o de entender lo que sea sin jactarte de ser la mejor.
Que tonto era al principio.

Cualquiera que quisiera tener una conversación realmente reveladora o pasar el rato cultivando sus neuronas,
sin duda alguna debería hablarte.
Tenés la capacidad de escuchar y entender,
de enseñar sin presumir y de ser la mejor persona y la más capacitada para iluminar a quien sea.

Amo que seas la profesora particular de quien te conozca, que me enseñes cada día algo y poder pagarte con un beso.
Confieso que amo escucharte aconsejando a otros y esa facilidad para demostrar todo lo que sabes sin presumir de ello.

Me encanta poder enseñarte,
¿Por qué?
Pues porque me superas siempre.

Amo eso, y mucho, de tu inteligencia.
Es tu manera de ver el mundo,
esa capacidad de entenderlo todo y aún así,
contrario a mi lógica,
eso te vuelve más bondadosa.

Amo saber que sabés lo que querés,
amo que sea a mí,
pero más amo que puedas dedicarte a ser lo que quieras,
qué no haya manera de que algo te quede grande,
que si ahora quisieras dedicarte a ser astrofísica teórica lo logres sin sudar una gota.
Amo poder decirte:
Sos capaz de hacer lo que quieras,
anda y hacelo.

Amo EsoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora