Una fraternidad, cinco chicos, ¡¿Y yo?!

30. "Historia de un cuento"... "Cierra los ojos"

NARRA ALEXANDRA

— ¡Recuerden entregar una rosa roja a la chica que les gusta! — la voz irritante de una de las porristas me sacaba de quicio, masajeo mi sien — ¡Mañana es el día del baile del amor!

— ¿No sé supone que eso se celebra el catorce de febrero? — solté.

Si las miradas matarán, yo ya estaría muerta.

— Si, pero por cuestiones de la institución no se puedo celebrar, sino te agrada la idea no participes.

— ¿Y tú acaso lo harás? — apoye mi mentón en la palma de mi mano — Ni siquiera tienes pareja.

Creo que ella tiene un tic en el ojo.

— ¡Cállate!

Kendall tapa mi boca con una palma de su mano.

— Disculpala, ella sufre de hablitis aguda.

Ella hace una "O" perfecta en su boca de labios rojos pasión.

— Pobre, ¿Qué es eso?

— Fastidio a que alguien plástico chille en vez de hablar. — mi hermano retuvo la carcajada.

— ¡Cómo les decía, la temática del baile es Historia de un Cuento! — exclama/chilla, mis oídos sufren poco a poco.

— Chicos, todos a sus puestos. — había ingresado la profesora al aula de clases — Solo dejen un borrador, un sacapuntas y su lápiz, es prueba de Cálculo lll.

Sentí que todo daba vueltas. — Oh, carajos... No lo sabía.

— Haz estado perdida en tus pensamientos. — murmuró Kendall.

— ¿Tú sabías de ese examen? — cuestiona mi hermosa girando a mi dirección, negué — Oh. Voy a reprobar.

— Nadie lo sabía. — comenté.

Pero siempre algo te baja la poca felicidad.

— Yo si, ella aviso hace una semana. — comenta Asher mientras chequea algo en el celular, chasqueo mi lengua y le arroje un borrador a la cabeza — ¡Aush! Pero que...

— Silencio, allá todos silencio entregaré las pruebas.

Mi celular vibró y mi corazón igual al leer el mensaje.

Amor❤️

De esta no te salvas, te
voy a dar un buen castigo
Alex, espera y verás.

Mordí mi lengua, era un idiota ególatra con demasiada guapura y... Lo quería demasiado, mis mejillas estaban rojas.

— Señorita Morgan, ¿Está bien? — miré a la profesora, todos miraron a mi dirección me había quedado como idiota viendo la pantalla del celular y mis mejillas delataban mi vergüenza de ese momento.

— Oh, S-si.

Asentí y ella hizo lo mismo.

Miré a todos a mi alrededor, parecían sumidos en sus pensamientos intentado solucionar la prueba, miré al techo.

Diosito, ayúdame.

Volví mis ojos a la prueba y suspire. Ojalá y todo me salga bien, al menos era prueba múltiple la mayoría de las preguntas.

***

Miré la hoja calificada con una cara de asombro y maravilla.

¡Santísima madre!

— Aprobé... — murmuré mirando la prueba en mis manos, incrédula volví a checar.