Si Wyatt fuera tu novio, se ofrecería a cuidar de tus hermanos cuando tú ni tu madre pudieran. Wyatt quiere mucho a los niños, pero no es el mejor cuidandolos.
Narra Wyatt.
Estaba afuera de la casa de ____tn, hoy cuidaría de sus hermanos. Ella y su madre saldrían a no sé dónde, ya que no me quiere decir. Según ella es "sorpresa". Me ofrecí a cuidar de ellos, y no me pesa en lo absoluto. ¿Qué tan malo puede ser?
—Hola amor.—me dijo ____tn, dando un beso en mi mejilla. Instintivamente sonreí, sus besos son lo mejor que me puede pasar. —Hola hijo.—dijo mi suegra, con una sonrisa en su rostro. Afortunadamente yo no le caigo mal, ni ella a mí. —¿Listo para cuidar a esos mocosos?—dijo ____tn, poniendo sus manos sobre mis cachetes. Su madre iba caminando hacía su carro, y al parecer la escucho, ya que le dio un golpe en la espalda y no pude evitar reír. —No deben ser tan malos. Son tiernos y lindos, se parecen a ti.—dije, metiendo mis manos a los bolsillos del pantalón. —Ojalá.—dijo ____tn, rodando los ojos. —Entonces, suerte cuidandolos. Cualquier cosa me llamas, te amo.—añadió ella, despidiéndose de mí. Yo sólo asentí, y ella se dirigió a su carro.
Caminé hacia la puerta, pero estaba cerrada. ¿Cómo iba a abrir? Tuve que tocar, esperando que alguno de sus hermanos abra.
—Hola.—dije, con una sonrisa. Me abrió Cristina, la hermana menor de ____tn. Tiene 9 años, mientras su hermano gemelo, Cristian, tiene 8. —¿Hola?—dijo ella. —Soy Wya...—estaba por decir, pero ella me interrumpió. —Eres el novio de ___tn. No está.—dijo su hermana. —¿Quién es? ¿Pediste pizza?—dijo su hermano, acercándose a la puerta. —No, es su novio.—susurró ella. Obvio escucho, dios mío. —Agh. Adiós.—dijo él, azotando la puerta. —¡Cristian! ¡Él nos podía comprar pizza!—dijo su hermana, al fondo. —¿Nos vienes a cuidar?—dijo Cristian, abriendo la puerta. —Si, justo a eso venía.—respondí, ráscandome la cabeza. —Que aburrido.—dijo el niño, volteando los ojos y abriendo totalmente la puerta. El niño camino hacia el sillón y se aventó, mientras su hermana me dio una sonrisa esperando a que yo entrara a la casa. Con ella me llevaré mejor, sin duda. —Y, ¿Quieren comer pizza?—pregunté, por lo que había escuchado antes. —¡Si!—dijo Cristina. —Me gusta igual que la de ____tn.—dijo el niño, mientras encendía la tele. —Cristian, ya te dije que no me gusta el pepperoni. Soy alérgica.—dijo Cristina. —Wyatt, no compres de esa. Compra de salchicha.—añadió la pequeña, volteandome a ver. —Cállate Cristina, de pepperoni con carne molida. Y ya.—dijo Cristian, retando a su hermana. Yo sólo disfrutaba el show. —De salchicha. Me voy a morir si como eso.—insistía Cristina. —A nadie le importa.—dijo el niño. —¡Compraré las dos! Tranquilicense, todos comerán. Por cierto, qué buena elección Cristian.—dije, mientras sacaba mi celular para llamar a Domino's Pizza. —Sólo por qué te gusta mi hermana.—dijo el niño, e inmediatamente lo volteé a ver. —Cállate, al menos a ella alguien la quiere.—le dijo Cristina a su hermano.
El niño volteó a verla y empezó a perseguirla, intentaba atrapar a Cristian pero él corría por toda la casa.
—¡Paren ya!—gritaba, pero era inútil.
Corrían por la cocina, por la sala, por el patio, estaban por todas partes. Hasta que Cristina llegó y me abrazó por los pies. Era demasiado alto para ella.
—¡Sueltalo o le diré a ____tn que te gusta su novio!—decía Cristian. —¡No me gusta, cabeza de huevo!—decía Cristina a su hermano. Esto era el colmo. —¡Calmense los dos! Si no paran, no compraré la pizza.—dije, a lo que Cristian rodó los ojos y se fue a sentar de nuevo. —Me caes bien, Wyatt.—me dijo Cristina, aún abrazando mis pies desde abajo. Volteé a verla, y ella me miraba desde abajo. Sus ojos se veían iguales a los de ____tn. —Tú a mí.—le dije a la pequeña, a lo que ella me soltó.
Pedí la pizza, y empecé a tratar de calmarlos. Discutían por el control de la televisión, a lo que la mejor manera de solucionarlo fue darle mi celular a Cristian. El niño estaba jugando Fortnite, y jugaba mejor que yo.
—¡Llegó la pizza!—gritó Cristian, aventando mi celular al suelo mientras corría a la puerta. —Estúpido, ¡le tiraste el celular a Wyatt!—gritó Cristina, corriendo detrás de Cristian.
Recogí mi celular del suelo con el mayor miedo del mundo. Cuido mis cosas como mi alma, y si mi celular se rompiera, no sé cómo reaccionaria. Afortunadamente, no le pasó nada. Cerré todas las aplicaciones que Cristian dejó en mi celular, y vi que tenía un mensaje de ____tn que decía "Ya vamos para la casa. 💕" ¡Milagro!
—¡Wyatt paga la pizza!—gritó Cristian desde la puerta. —Ahí voy.—dije, caminando hacía la puerta. Sólo llevaba una hora ahí, y me sentía muy cansado. —Son... ¿Eres el niño de IT?—dijo el repartidor, sacando su celular. —¿Nos vas a dar la pizza o no?—dijo Cristian, cruzando sus brazos. —Si, soy yo.—dije sonriendo, tapandole la boca al niño. No quiero que después digan cosas que no sobre mí. —¿Nos podemos tomar una foto?—dijo el repartidor. —Claro.—respondí. —Cool, hermano. La pizza va por mi cuenta, ¡Mi hermana te admira mucho!—dijo el repartidor, dándonos la pizza. —Uhhh, le voy a decir a ___tn.—dijo Cristian, llevándose la pizza. El repartidor sólo miró raro y se fue.
Cristian POR FIN se calló y empezó a comer. Cristina me hablaba sobre lo que hacía ___tn, y yo escuchaba atento. Cada vez me enamoraba más de ella, y era enserio.
—¿Wyatt?—dijo ___tn, abriendo la puerta de la casa. —¡A Cristina le gusta tu novio!—gritó Cristian.
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