Epílogo

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Cinco años de un felíz matrimonio han pasado, Andreina cumplió ya los once años y Emma los seis.

Las dos cada día más se convierten en la luz de la vida de sus padres, ellos la aman con todo lo que unos padres pueden amar. Y ahora van a cumplir la promesa que ofrecieron a las niñas.

- ¿estas lista princesa?- le dijo Erika a su hija mayor

- mamá ya te he dicho que no me digas princesa, ya estoy grande- rodó los ojos

- tú jamás vas a dejar de ser mi princesa aunque tengas cincuenta años- le dio besos en su rostro

- ¡mamá ya! Todos nos miran- a Erika no le duele que su hija le diga eso porque sabe perfectamente que aunque no lo acepte le gusta los apapachos de su madre.

- esta bien- miró su reloj y vió que Christopher llegaba tarde- el mismo impuntual de siempre.

Por otro lado Christopher estaba que asesinaba a su chofer porque no se movía. Después de mil años lograron llegar al aeropuerto, el chofer le ayudó a llevar las maletas hasta el lugar donde es el trauma, pero eso lo hace el chofer y él se fue con la niña donde Erika.

- papi, mami ¿se va a enojar?- comentó mientras caminaba de la mano de su padre.

- no muñequita, tu mami es incapaz de enojarse contigo- le puso un mechon de cabello detrás de la oreja- a mí si me va a mandar a la mi...

- ¿papi que es la mi...?- en ese momento se arrepintió de casi haber dicho esa barbaridad

- nada mi amor, olvidalo. Oh mira allá está mami- la niña buscó con la mirada a su mami y cuando la encontró sonrió ampliamente, el castaño se aseguró que Erika la esperara para soltarla.

- ¡mami!- saltó a sus brazos una vez estuvo cerca a ella- ya te extrañaba- le acarició una mejilla

- yo también lo hacia muñequita- le dio un beso en la nariz y se restregaron las mismas.

En ese momento Christopher se puso a pensar en lo idénticas que Emma y Erika eran, son como dos gotas de agua. Las dos con sus ojos verdes, el cabello castaño y esa tez blanca-morena que tanto le gusta a Christopher. Mientras que su Andre y él también eran idénticos.

- ¿porqué tan amargada señorita? - se acercó a su hija y ella lo abrazó cuando lo vió.

- papá, hasta que llegas- sonrió y se separó de él- pensé que ibamos a irnos allá sin ti y Emmy.

- como crees, si yo esperaba este viaje tanto como tú- sonrieron hasta que Andreina sintió una manita en su sudadera.

- Andre ¿vamos a inos juntas?- se acercó a su hermana

- por supuesto enana- le alborotó el cabello- el viaje no sería lo mismo sin ti- Emma sonrió

Christopher se acercó a su esposa y la tomó de la cintura acercandolo a él.

- vaya que creamos hermosas hijas- ella lo miró y él tenía la mirada fija en sus hijas que en ese preciso momento se reían de algo.

- claro que lo hicimos- ella puso su cabeza en su pecho- hicimos un buen trabajo- él le dio un beso en la cabeza

El chofer llegó y les informó que sus boletos en primera clase estan listos y las maletas igual.

- gracias Rubén, puedes irte- él se iba a ir- por cierto...te encargó la casa

- si señora- sonrió y se fue.

- oye por cierto, ¿porque llegaste tan tarde?

- perdón es que Emma me complicó en su peinado.

Obstáculos ~Christopher Vélez~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora