Obstáculos ~Christopher Vélez~

64. Un día con papi

Erika se levantó con toda la pereza del mundo, arregló su habitación y fue a despertar a la niña.

- despierta princesa, debes alistarte para que te vayas con él- ella se levantó y corrió al baño sin decir nada- ¿estas bien mi amor? - dijo a través de la puerta.

- si mami, solo queria hacer pis- la castaña sonrió y fue a tender la cama de la niña y a sacar su ropa.

Sacó unos pantalones de mezclilla, una blusa floreada blanca con mangas largas, un chaleco de mezclilla y unos zapatos adidas blancos. Los puso en la cama y la niña salió del baño.

- buenos dias mami- corrió y le abrazó la pierna

- buenos dias chiquita- se agachó a su estatura y le dio un besito- ¿estas lista para ir con él?- ella asintió- entonces vamonos a arreglarte.

Se levantó y llevó a la niña a la ducha, la ayudó a darse el baño para luego envolverla en la toalla y llevarla a vestirse.

Una ves que estuvo vestida y peinada, le puso crema en el rostro.

- ¿mami me vas a maquillar?

- no princesa, tu no necesitas ese maquillaje. Tu eres hermosa así- sonrieron- ¡lista! Ve a esperarlo en la sala y yo voy en unos minutos ¿si?- la niña sonrió y corrió a la sala- ¡cuidado las escaleras!

La castaña se fue al baño de su habitación, se cepilló el cabello y se puso crema en el rostro hasta que sonó el timbre.

Ella bajó las escaleras, se dirigió a la niña.

- ¡mami seguro es él!

- ay mi amor como crees es demasiado temprano como para que sea él- abrió la puerta y se llevó la sorpresa que si era él

- hola Erika- ella estaba en shock por eso no se dio cuenta que Christopher la miraba de pies a cabeza, como no iba ha hacerlo si ella tenia una camiseta que le llegaba dos pulgadas más abajo del muslo. Las ganas de tenerla debajo de él y hundirse completamente en ella volvieron a atacar.
Esas ganas de sentir las uñas de la castaña hundiéndose en su espalda mientras él le da todo el placer del mundo.

- llegaste temprano Christopher- sonrió nerviosa- pero pasa que ella te está esperando

Él se puso nervioso al entrar a la casa y aún más cuando la vio sentada allí y cruzaron miradas.

- bueno yo los dejo. Me voy a la cocina- una vez alli se preparó sus cereales con leche.

- hola Christopher- se acercó a él y lo abrazó haciendo que él sonriera y correspondiera al abrazo.

- hola linda- se agachó- ¿te acuerdas que te dije que nos veríamos de nuevo?- ella asintió- ves que cumplí con lo que te dije- ella sonrió- este....Ya sabes que yo...

- tu eres mi papá- sonrió- siempre quise conocerte....

- y yo siempre quería tener una hija bella como tú- le acarició la mejilla- y al parecer se nos cumplió lo que soñamos- la castaña que estaba escuchando todo sonreía como boba al oir esa conversación- y estoy muy feliz de ser tu papá....pero ya vamonos que tendremos un dia excepcional.

- pero...¿mami va?

- no mi amor. Tu papá y tú deben tener su dia- salió ella de la nada y se puso en cuclillas- yo me quedaré aquí haciendo cualquier cosa.

- ¿no te vas aburrir mami?- las manitas de la niña estaban en su rostro

- no mi amor. Estaré bien, tu vas a ir con él a divertirte y después me vienes a contar como siempre ¿si?- la niña asintió- que te diviertas calabazita- le dio un beso en la frente