Me marché a mi habitación sin mirarlo.
Sólo a él se le podía ocurrir semejante estupidez. Ahora Diego estaba enojado con los dos y para colmo había corrido a Manuel del departamento.
Diego entró unos minutos después.
Are: Mira no quiero discutir-me acosté boca abajo, abrazando una almohada.
Diego: No vengo a discutir...pero Arely, cuántas veces te dije que no le hicieras caso?-sentí que se sentaba en la cama.
Are: Manuel es una buena persona, tú sólo le conoces a como era antes, él ya cambió y yo soy testigo.
Diego: Quizá sólo sea un capricho pasajero...
Are: ¿Que no entiendes que lo amo? -me puse de rodillas en la cama y lo miré a los ojos
Diego: No puede ser que en menos de dos meses te hayas enamorado de él, no mucho menos que haya cambiado.
Are: Pues sí, aunque no lo creas las dos cosas son posibles. Y me decepciona darme cuenta que no me crees capaz de dirigir mi vida Diego.
Diego: Intento protegerte, que no salgas lastimada. Pon los pies en la Tierra Arely por favor!
La conversación había subido de tono y él ya se había puesto de pie, movía los brazos frustrado.
Are: Quiero estar sola, vete Diego por favor.
Diego: Sólo...piénsalo.
Se fue. No había nada que pensar, yo amaba a Manuel y punto.
Al despertar la mañana siguiente encontré un papel doblado bajo la puerta.
Decía esto:
"Arely espero que me perdones, se que la reacción de Diego no fue buena y ahora enfrentaré las consecuencias. Te amo como no te imaginas, nunca lo olvides.
Pd. Por si quieres darme una visita, vivo en el 3 piso de este mismo edificio, puerta 2;)
...Siempre tuyo, Manuel"
Significaba que ya se había marchado, pero no tan lejos, si no que 3 pisos debajo de donde estaba yo.
Tenía esa mala costumbre de enojarme sólo en el momento, ya pasadas las horas el mal humor se iba desvaneciendo hasta casi ni acordarme del motivo de mi enojo, y eso sucedió también con Manuel, a quien ya extrañaba tanto.
Fui hasta su habitación, la cual estaba vacía o al menos ya no tenía nada que fuera de Manuel.
Diego y yo desayunamos en silencio, estaba enojado conmigo y lo supe porque no me hablaba, ni siquiera me dirigía la mirada.
Miré despistadamente su ceja, la cual tenía un color entre rosa y rojizo, pero no pude mirarle más porque se levantó y se fue a su habitación. Unos minutos después volvió.
Are: ¿A dónde vas?-le pregunté cuando vi que tenía intención de salir.
No me contestó y cerró la puerta tras de él.
Are: Ah está bien, no llegues tarde.
Lavé los platos sucios y pensé en darle una visita a mi novio.
Entré al elevador y bajé 3 pisos, luego caminé lentamente hasta llegar a la segunda puerta.
Levanté la mano pero no toqué la puerta, porque alguien se me adelantó a abrirla.
Manuel: Sabía que vendrías, ya no estás enojada conmigo?
Are: Digamos que sólo un poco...-le sonreí.
Se acercó a mí y me dio un beso.
Manuel: No sabes cuánto extrañaba darte un beso.
Are: Pero si no ha pasado ni un día!
Manuel: Para que veas que yo siempre te extraño, pero no te quedes ahí! Pasa a mi nuevo hogar;)
El apartamento estaba totalmente amueblado, parecía como si ya hubiese vivido ahí desde años atrás. La sala estaba casi entrando, al igual que la de Diego. La cocina estaba a mano derecha y las habitaciones, que sólo eran dos, estaban a mano izquierda junto con el baño.
Manuel: Ven a ver mi habitación!:D
Tomó mi mano y me guió por un corto pasillo hasta llegar a éstas. Abrió la que se encontraba a mano derecha.
El cuarto estaba adornado con una gran alfombra rojiza, que hacía juego con las paredes rojo bajito. La cama, si no me equivocaba, era una queen size; tenía sobre almohadas y cojines rojos. Había también dos mesitas de noche, una a cada lado de la cama y una mesa poco más grande que estaba al lado de un espejo de cuerpo entero, y finalmente un sillón acolchonado. Todo esto, de color blanco.
Manuel: Que dices? Lo he mandado decorar, a mi me ha fascinado este contraste de blanco y negro.
Are: Es excelente! Me encanta!!
Me tiré sobre la enorme cama.
ESTÁS LEYENDO
Give me everything (ADAPTADA)(Terminada)
FanfictionGive me everything Arely tiene que mudarse a vivir con su hermano mayor a otro estado, aunque ella se rehusa no tiene más elección que hacerlo. Allá conoce a Manuel un tipo chulo que tiene a sus pies a la mayoría de las mujeres, es amigo de su herma...