¿Alguna vez te has cansado de correr y no llegar a ningún lado?
¿Has deseado tener un lugar y un corazón donde detener el paso?
Pide al tiempo que se detenga, dale fin a tu inútil carrera,
Ve por aquello que te pertenece... sin miedo a nada.
Tal vez, será que esta historia ya tiene final.
No sé por qué hoy te siento tan distante de mí,
Y a pesar que lo intento de nuevo,
Tal vez llegué tarde ya no hay nada que hacer...
Tal vez, será que por ahora ya no hay nada que hablar
Tal vez, esta vez, necesitamos tiempo para pensar.
Yo por mi parte propongo intentarlo de nuevo,
Volver a empezar
Que por más que lo pienso
No encuentro una sola razón para seguir sin ti...
Tal vez me sorprendió la vida por la espalda
Y tira y tira se rompió la cuerda,
Tal vez nunca entendí lo que eras para mí
Tal vez yo nunca supe a quien amaba,
Te necesitaba.
"Tal vez", Ricky Martin.
Camino a la cena ofrecida en honor de la compañía Strattford la Sra. Elroy no paraba de hacer preguntas a Annie, quien ya comenzaba a sentirse atosigada y cansada, pero comprendía la excitación que causaba su llegada.
Albert y Archie bromeaban y se ponían de acuerdo para comenzar a poner en orden los negocios de la familia. Como abogado, el jóven Cornwell no sólo debía administrar su herencia, sino también los negocios de sus recién adquiridos suegros, y esto lo tenía un tanto preocupado. Sólo Candice mantenía un pacífico silencio, similar al que reina antes de que se desaten las tormentas en la mar.
En la puerta del salón, el Sr. Hattaway y Karen Claise recibían amablemente a los invitados mientras los valets los conducían a sus lugares y recogían los enormes y costosos abrigos de los presentes.
Los Leegan descendieron del lujoso automóvil familiar, Eliza captó inmediatamente las miradas al descubrirse su nada imperceptible escote.
¡No está! ¡no puede ser!... ¡tiene que venir! – dijo mientras recorría con una mirada de evidente frustración el salón – menos mal que esa huérfana todavía no llega.
Candy tembló al detenerse el carruaje, no tenía la menor idea de cómo comportarse, seguramente Patricia iría acompañando a Terry, después de todo, la presencia del niño en el teatro era un indicador de que toda la compañía estaba al tanto de su situación, y quizá ya no pensaba ocultarla.
Sra. Elroy, Sr. William, Sres. Cornwell, Srita. Andley... bienvenidos... la Srita. Karen Claise, primera actriz de la compañía – dijo Hattaway.
Encantada de recibirlos... mis felicitaciones Sres. Cornwell... encantada de volver a verte Candy – sonrió la actriz.
¿Cómo? ¿se conocen? – replicó sorprendida la Abuela
Sí, digamos que me curó de un mal que parecía ya no tener remedio – contestó Karen – pero pasen, por favor... pasen.
La actriz detuvo un momento a la chica y se apartaron un poco de la entrada para conversar.
¿Tan mal recuerdo tienes de mí que no me merezco un abrazo Candice?
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Sin Miedo a Nada
FanfictionSusana ya no está. Terry y Candy se reencuentran, pero la vida le tiene una gran sorpresa a la rubia pecosa: Terry tiene un hijo y no es de la actriz. ¿Con quién rehizo su vida Terry? ¿Quién le robó su corazón? Un pequeño secreto, una verdad a media...