— E-eso es muy interesante.
— ¿De verdad creés eso?
El joven Stuart no se podía sentir más feliz al estar hablando con el, han pasado como unos tres meses desde que estaba echándole un ojo a el azabache.
— ¿Te confieso algo 2D?— Dijo el de piel oliva al percatarse que la conversación estaba haciéndose aburrida.
— D-Dime.
— Desde hace unos días, he querido hablarte, pero...— Ríe nerviosamente— Era bastante tímido en esos momentos.
A Stuart casi se le sale el corazón, ¿De verdad su Crush le estaba diciendo esas cosas? ¿A quién le pasa eso?
Según el joven, no muchas personas.
— E-es halagador Murdoc— Toma aire— La verdad yo estaba es las mismas condiciones, no sabía como acercarme a usted.
Stuart empezó a hablar como si estuviera teniendo una plática con la mismísima reina de Inglaterra.
Murdoc solo sonrió, de ternura.
— Me sorprendió que fuéramos a la misma clase de música, y me alegra poder compartir más momentos contigo— Murdoc miró al menor, este le devolvió la mirada derritiéndose de amor— Y... Ya sabes, conocernos mejor.
Stuart gritaba internamente.
— Eres muy interesante 2D, me gusta cómo piensas, ajalá seamos grandes amigos— Después de decirle aquello, le guiñó el ojo de una manera juguetona.
— E-eso suena g-genial, increíble— ¿Habrá alguna vez donde Stuart aprenda a dejar de tartamudear?
A Murdoc se le hacía, tierno.
— Nos veremos al rato, tengo planes con mi hermano— Murdoc le sonrió a Stuart en forma de despedida y salió de aquella cafetería, no sin antes dejar un poco de dinero para la cuenta.
Stuart suspiro como una colegiala japonesa en pleno verano.
Para 2D, Murdoc es una persona muy buena.
×××××××××××××××
Perdón.
