Capítulo 1

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- Amber despierta.- Me zarandean. Abro los ojos. Mi hermano Chad me sonríe.

- Vamos o llegaremos tarde a clase.

- Oh mierda. Las clases.- Me levanto de golpe y corro a mi baño. Me lavo y me cambio. Hago la cama y bajo al comedor. Cojo mi mochila y una pera.

- No me das un beso?.-Dice mi madre. Corro a darles un beso y salgo disparada hacia el instituto. Llevo un rato caminando cuándo me doy cuenta de algo. Dónde mierda está el instituto?. Miro la calle. No hay nadie. Dónde está la Policía cuándo la necesitas?

- Amber!!!.- Oigo qué me llaman. Me giro y me encuentro a el chico del otro día.  Cristian.

- Hola Cristian.

- Con ese pelo cualquiera te reconoce.  Ahora entiendo porqué te llamas Amber.

- Sí.  Es por mi pelo. Por cierto. Dónde está el puto instituto? .-Pregunto.

- Yo voy para allá. Vamos juntos si quieres.- Este chico es un encanto. Asiento con una sonrisa. Caminamos hasta llegar a un edificio de ladrillos muy grande.

- Piensa qué esto es escuela instituto y Universidad.- Dice Cristian leyendome la mente. Lo miro sorprendida y el ríe. Entramos al instituto/escuela/Universidad.  Me guía hasta Secretaría dónde me dan mi horario y mi taquilla. Cuándo guardo las cosas y me giro me choco con alguien. Caemos al suelo. Me encuentro con una pelinegra de ojos café qué me miran tristes.

- Lo siento lo siento lo siento. - Me dice. Yo le sonrío.

- No importa. Soy muy despistada.- Normalmente le hubiese echado la bronca pero está chica me parecía muy simpática y creo qué haría migas con ella.

- Soy Diana Bree .-Dice. Me levanto y la ayudo.

- Amber Edwards . Encantada de conocerte.

- Igualmente.- Sonríe.- Qué te toca ahora?.- Pregunta.

- Arte.

- Y a mí!!!! Te importa si vamos juntas?.- Pregunta.

- Claro! Además soy nueva y esto es enorme.

- Me lo imaginé. Aquí todo el mundo se conoce.- Andamos hasta llegar a una aula llena de colores. Nos sentamos en una fila al azar y esperamos a la profesora.  Ella llega y se sienta en su mesa.

- Muy bien clase. Hoy quiero qué continueis el dibujo qué empezasteis la otra vez en clase.-Me mira.- Tú debes de ser Amber Edwards. Ya te presentaras. Puedes hacer un dibujo y luego enseñarmelo.- Yo asiento. Todo y ser la profesora de arte me había caído mal. Antipática. Saco mi dibujo del bosque y sigo dibujando. Me centro en las líneas de los arboles.  Cuáles son más grandes y finas o el contorno de las hojas. Lo acabo y se lo enseño. Ella pone una cara rara pero asiente.

- Está muy bien. Es el bosque verdad?.- Pregunta. Yo asiento. Entonces me fijo en el dibujo. Algo se esconde entre los arboles. No se puede distinguir. Suena la campana y salgo con Diana de la clase. Empezamos a hablar de el pueblo hasta qué una voz me llama la atención.

- Hey Amber.- Cristian otra vez. Camina a nuestro lado. Suena la campana. - A se me olvido decirte qué el primer día sólo hacemos una hora.- Dice. Oh mierda. Jace y Chad.

- Oh bien. Tengo qué ir a por mis hermanos. Nos vemos.- Me despido de ellos. Salgo corriendo por los pasillos hasta qué choco con un pequeño cuerpo. Se escucha un ruido y el cuerpo cae al suelo. Es un niño de primer o segundo de pelo pelirrojo y ojos miel.

- Oh disculpa.  Iba corriendo.- Digo ayudandolo a levantarse. Él ríe bajito.

- Ya somos dos despistados. Soy Harry.- Se presenta.

- Amber.

- Encantado. Bueno tengo qué irme.- Sale corriendo otra vez. Vaya niño. Entonces veo a mis dos hermanos hablando.

- Qué tal el primer día de "clase"?.-Pregunto haciendo comillas con los dedos.

- Mal. Me ha tocado Educación física.- Dice Chad. Él odia los deportes. Otra cosa en la qué es diferente a nosotros dos.

- Y a mi música.- Bufa Jace. Salimos los tres del instituto hablando y bromeando.

- Cómo habéis llegado al instituto?.-Pregunto.

- Chad con su habilidad con la simpatía ha hecho una amiga qué nos ha ayudado.- Explica mi mellizo. Yo asiento. Llegamos a casa y nos encontramos con una nota.

- Hemos salido por trabajo y tardaremos dos o tres días en volver. Oh no jodas. Acabamos de llegar!.- Leo molesta. Mis padres trabajan de abogados y suelen tener casos juntos.- P.D: Vuestro primo pequeño se queda a dormir. La comida está en la nevera.- Oh sí. Resulta qué unos tíos míos viven aquí y tienen un hijo qué tiene un año menos qué Chad. En ese momento llaman a la puerta.

- Ya voy!!!.- Grito. Abro y me encuentro con Harry con una sonrisa.

- Hola Amber. Sí lo preguntas sí qué soy tú primo.- Dice. Yo asiento lentamente y lo dejo pasar. Se presenta con Chad.

- Qué tal tío?.-Pregunta Jace.

- Esos modales. No soy tú colega ni nada de eso. Y por cierto apestas.- Dice arrugando la nariz. Se me escapa una carcajada.

- Y tú quien te crees qué eres?.- Pregunta.

- Yo... soy... Tú primo!!.- Dice poniendo voz de Dark Vather. Yo y Chad estallamos a reír. Jace bufa molesto y Chad le mueve el pelo.

- Mi pelo no se toca.- Dice.

- Tú eres muy señorito no?.-Le pregunto.

-Para nada. Sólo es el hambre. Puedo explorar la casa?.- Pregunta. Yo sonrío y él me abraza.- Gracias.- Y sube las escaleras. Saco la pizza de la nevera. Cuándo ya está lista la comida los llamo.

- A comer!!!.- Todos bajan corriendo. Harry mira la pizza y devora su parte.- Voy al bosque.

- No es peli...

- Créeme nací aquí. Peligroso sería para vosotros.- Explica. Sale por la puerta de cristal. Qué niño más raro.

- Vaya. Cómo si no existieramos.- Dice Jace. Decido acompañar a mi primo y salgo por la puerta. Estoy a punto de entrar cuándo oigo una voz cantando. Es melodiosa y suave. La sigo y me encuentro a mi primo sentado en la hierba acariciando a un caballo.

- Harry.-Lo llamo. Él se asusta. Luego relaja su expresión.

- Hola Amber. Qué haces aquí? .- Pregunta.

-Vine a explorar. Quien es ese caballo?.-Pregunto.

- Es jazmín. Una yegua salvaje qué domestique hace tiempo.- La yegua frota su frente contra la de mi primo. Este se le sube encima.

- Volvemos?.- Me tiende la mano. Sorprendida la agarro y subo detrás suyo. Este acaricia a la yegua y empieza a caminar. Llegamos a casa y nos bajamos. La yegua se va y entramos.

- Tengo qué decir qué eso a sido muy raro.- Él sólo ríe y niega divertido.

Mágica pero estúpida realidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora