Mágica pero estúpida realidad

Capítulo 4

- La la la la la la.- Tararea mi primo de camino al instituto. Yo voy hablando con Cristian y mi madre nos había obligado a ir con Louis qué iba con Jace. Harry tropieza con una piedra y mueve los brazos frenéticamente. Justo cuándo va a caer Louis le hace una foto. La envía a alguien y abre los ojos.

- Anderson vas a morir por enviar eso.- Lo amenaza mi primo. Él está callado. Miro su pantalla. Hay un montón de "Qué mono!!!" o " Es adorable". Yo río.

- Mi desconocido primo te roba la fama por caer. Es patético.- Él me fulmina con la mirada y llegamos al instituto. Allí me encuentro a Diana y nos fundimos en un abrazo. Estos días nos hemos hecho muy amigas y eso qué somos completamente diferentes.  Ella tiene el pelo negro y liso y los ojos café. Es alta y delgada. Yo tengo el pelo ámbar y ondulado y los ojos de un gris muy claro y soy de estatura media. Ella prefiere música y yo arte o educación física. A ella la miran muchos chicos y a mi no. Aunque eso me da igual.

- Qué tal Di?.-Pregunto.

- Bien.- Jace se nos acerca.

- Verte con una chica es raro Amber.  Todos tus amigos han sido hombres. Te confundes con uno de nosotros.

- Si si. Lo qué digas. Nunca pienso llevar tacones ni un vestido.- Diana niega divertida. Sonríe y se le marcan unos hoyuelos en las mejillas. Se ve adorable.

- Toca arte.

- Bien!!! Aunque la profesora me mira raro.

- Ya...- Parece inquieta.- Lo hace con todos los nuevos.- Dice Más tranquila. Yo sólo asiento.  Entramos a clase y saco directamente mi dibujo sin qué mi amiga lo vea. Es su retrato. Sigo dibujando y la maestra ya está sentada. Acabo y se lo enseño. Sonríe.

- Muy bien es...

- Shht.Es una sorpresa.- Ella ríe y asiente. Qué rara. Me acerco a Diana.

- Hey. Quieres ver mi dibujo? .- Ella asiente. Cuándo gira la cara al dibujo su cara es épica.

- Oh dios mío.  Por las barbas de triton. Esto es una pasada.- Ella me abraza y le doy su retrato. Lo mira embobada. Suena el timbre y salimos de clase. Nos encontramos a Cristian con Jace. Diana corre hacia ellos.

- Mira lo qué me ha hecho Amber!!!.- Cristian sonríe y Jace me mira extrañado.

- Desde cuánto sabes dibujar?.- Dice.

- Sabes ese cuadro qué te regalamos qué te encanta?.- Él asiente.- No era de un pintor famoso. Era mío.- Su cara cambia a confusión.

- Pues ya no me gusta.-Pone morros.

- Por eso no te dije qué lo pinté yo.- Cristian ríe. Yo le doy una colleja. Sigue riendo.

- No te ha dolido?

- Si pero cuándo río nada me detiene. Soy.... Soy....

- Estúpidoman?.-Pregunto.

- Idiotaman?.- Pregunta Diana.

- Ahora no se me ocurre nada. Pero ya vereis. Lo lograré.

- Todos te tenemos confianza Cris.- Digo sarcástica. Pone morros.

- Te odi...- No acaba porqué mi primo cae encima suyo.

- Lo siento lo siento lo siento.- Dice levantándose y ayudando a Cristian. Louis va detrás.

- Oye!!!!.- Harry lo mira y arranca a correr. Louis frena cuándo me  ve.

- Qué?

- Hola Amber yo también te quiero.-  Me aparto cuando va a darme un beso en la mejilla y le doy en la nuca.

- Lástima qué el sentimiento no sea mutuo.- Respondo arrogante. Sigo caminando. Las otras dos clases las pasé hablando. Llega el recreo y voy con Diana al comedor. Nos sentamos en una mesa y alguien me llama la atención.

- Esto... Amber Edwards no?.-Pregunta una voz chillona. Ay no. Una rubia plástica.

- Sí? .- Digo.

- Veníamos a advertirte de algo.- Viva.

- De qué?

- No te acerques a nuestro Louis sí?  So... Él no se relaciona con gente pringada cómo tú ni nada de eso.-Yo me aguanto la risa. Tiene voz de pato.

- Louis no es mi amigo. Y además yo hago lo qué quiero. Ahora déjame tranquila.- Ella me fulmina con la mirada y se va. Yo y Diana nos miramos y estallamos a reír.

- Q-Qué voz.- Digo entrecortadamente. Ella asiente. Acabamos el recreo y volvemos a clase. Es historia y me toca con Louis y la plástica. Me siento en una esquina. La profesora llega y se pasa la clase hablando de un trabajo de la revolución francesa.

- Las parejas son... Edwards con Anderson...- Yo abro la boca.

- Qué? !?! Pero usted está loca?!?!! No pienso hacer el trabajo con el putito.- Grito.

- No lo insultes! !!.- Grita la plástica.

- Calla mala imitación de Barbie. Esto no va contigo.

- Lo siento señorita Edwards pero esas son las parejas. Ahora fuera de mi clase. Ya se ha acabado el instituto. - Salgo malhumorada de clase y Louis se me acerca.

- Dónde lo hacemos en tu casa o en la mía? .- Pregunta.

- Depende. Tienes espacio de sobras para hacer un trabajo?

- Yo no me refería al trabajo.- Dice divertido. Ruedo los ojos y salgo corriendo.  Después de todo somos vecinos. Ya nos veremos. Llego a casa y tiro mi mochila en el suelo. Cojo un trozo de pollo y me lo como. Al rato mi móvil suena. Desconocido.

- Quien eres? Qué quieres? Cómo has conseguido mi número?  No compro nada.- Digo.

- Soy Louis y te quiero a ti. Tu hermano me ha dado tu número.

- Jace te voy a matar!!!.- Grito. Oigo a Louis reír desde la otra línea.- Y tú que quieres?.- Pregunto.

- Puedo pasar por tu casa para hacer el trabajo?

- Eso no se pregunta hombre. Claro qué no.

-Demasiado tarde.- Dice delante mío.- La puerta estaba abierta.

- Bueno ya qué estás aquí y me imagino qué no te puedo hechar a patadas pasa .- Él sonríe arrogante y deja su mochila en el suelo.

- Vamos a tu cuarto?. Quiero conocer a tú cama.- Yo lo miro horrorizada y ríe.

- Idiota.- Murmuro. Subimos a mi cuarto.

- Vaya un cuarto e marimacho.- Le pego en el hombro. Se acaricia adolorido.- Ves? Pegas cómo un hombre.

- Chillas cómo una niña asustada.-Me burlo.

- Pero te gusta. Soy el mejor chillando.

- Vaya, veo qué tu ego crece.

- Tengo algo entre las piernas qué también crece.- Lo fulmino con la mirada.

- Eres un pervertido marra....- No me deja acabar porqué me tira en la cama. Se me acerca y me inmoviliza. Aparta mi pelo del cuello y se acerca. Empieza a succionar y a besar.

- Pa-Para...

- Oh vamos. A ti te pone.- Sigue mordisqueando y se separa.

- Te dije qué me vengaria.- Mira mi cuello sonriente. Amber respira. Uno. Dos. Uno. D...

- Qué mierda me has hecho en el cuello?!?!?!.- Le grito. Tengo un enorme moratón.

- Ahora estás marcada. Vuelve a decir qué chillo cómo una niña asustada.

- Eres un imbécil! !!.- Le doy una patada en la entrepierna y cae al suelo. Gime y se acaricia.

- Oh joder. Me he quedado sin descendencia. - Yo bufo.

- Eres un maldito idiota. Fuera de mi casa.- Él se levanta y me mira.

- Lo siento. No debí hacer eso.- Lo miro.

- Pensándolo mejor. Quédate aquí. No quiero un suspenso en historia.- Él sonríe. Esto va a ser duro. Convivir con un idiota.