Advertencia:
Esta historia contiene escenas de sexo duro y vocabulario fuertes, además de comportamientos abusivos, como violación, agresión, etc...por ello, si eres sensible a estos términos no continues. Sin embargo, quiero decir que no puedes olv...
Mientras Louis se arreglaba no podía dejar de pensar en el extraño momento vivido en la cocina, unos minutos antes.
Con ese agarre del alfa, había sentido algo en su interior, sobre todo cuando este le había dicho esas últimas palabras tan inquietantes con la voz ronca y sin dejar de mirarle.
—«Tú eres más hermoso asi al natural»—repitió susurrando mientras se le escapaba una sonrisa nerviosa.
Mientras en el vestíbulo, Harry intentaba buscar una explicación, al nerviosismo que sentía debido a lo vivido en la cocina minutos antes y con uno de los omegas de su padre.
—Esto es ridículo... no puedo poner mis ojos en él—se repetía a sí mismo—ese omega es propiedad de papá. Tan solo es un omega como los demás.... es uno más de tantos—rió intentando autoconvencerse—si eso es....uno de tant...
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El ojiverde miró al final de la escalera y se quedó en shock.
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—¿Estás bien Harry?, ¿ocurre algo?—preguntó el omega descencidendo—¿Que tal estoy?, ¿Me veo mal?—volvió a hablar al ver que el alfa lo miraba fijamente pero no se movía, ni hablaba.
Luego de unos segundos frente a frente, el alfa reaccionó.
Tras subir al coche, el omega se pasó todo el tiempo del recorrido mirando por la ventanilla, mientras que el alfa ojiverde sujetaba con fuerza el volante, intentando controlarse pues su manos picaban por querer tocarlo.
El dulce aroma del omega esa mañana era muy diferente al que recordaba de la noche anterior y eso sumado a su apariencia tierna y aniñada, nada hacía sospechar a lo que en realidad se dedicaba.
Harry se encontró maldiciendo a su padre por poseer tan hermoso omega y maldeciendose a sí mismo por sentir lo que estaba sintiendo.