Capítulo veinticuatro

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El alfa ojiverde conducía su coche a toda prisa por la carretera pues tras él venía un taxi donde viajaban un molesto Liam y una más que enfadada Gemma, ambos ansiosos por ponerle las zarpas encima.

El alfa finalmente condujo hasta las afueras de la ciudad, llegando a una pequeña colina en la que se detuvo, luego salió del coche y se acercó al mirador soltando un gran gruñido de frustración.

De repente escuchó tras él, el sonoro derrape de las ruedas del taxi en la gravilla e inmediatamente los dos alfas bajaron y se le acercaron.

—¿Por qué has venido aquí hermano?, ¿Y por qué estás tam agitado?.

Harry rió como loco y se agarró a la barandilla de madera que rodeaba el mirador del lugar.

—¿Recuerdas cuando papá nos traía aquí?.

La alfa asintió entristecida.

—Si, claro que lo recuerdo...él y mamá solían traernos cada domingo.

—Si y cuando mamá murió ya no volvimos aquí. ¿Sabes una cosa Gemm?....a mi me encantaba venir y que papá me contara historias y me hablase de cada rincón de éste hermoso paisaje. Mamá y tú soliais alejaros y coger flores o también observar a los distintos pájaros y  mariposas.

Gemma se alejó de Liam y se acercó a su hermano.

—A mi también me gustaban mucho los momentos que vivíamos aquí. Muchas veces me acuerdo de ellos y sobre todo de mamá, con las flores que yo le ponía en el pelo o con su bonita sonrisa mientras mirábamos al cielo, tumbadas en esa campiña de allá—dijo ésta señalando el lugar.

El ojiverde entonces abrazó a su hermana.

—Perdimos a mamá por una enfermedad en la que no pudimos ayudarla y ahora papá...

—Hermano, tranquilo. No perderemos a papá, él ya está bien del accidente. Nos dará guerra durante muchos años más.—dijo la alfa acariciándole la mejilla.

—No Gemm, papá ha estado muy grave y no solo por el accidente.

Liam se acercó.

—Amigo, ¿crees qué esto es buena idea?.

El alfa ojiverde asintió.

—Oye pero.... ¿qué es lo que pasa?, ¿Qué me estáis ocultando, hermano?.

—Gemm— tragó duro el ojiverde—papá tenía un tumor cerebral que le han estirpado.

—¿De qué demonios hablas?—gruñó la alfa muy alterada.

—Lo siento por no decírtelo antes pero no quería preocuparte más de lo que ya estabas.

De repente Gemma cayó sobre sus rodillas.

—Pe-Pero... él está bien ahora ¿Verdad Harry?,  ¿Verdad hermano?.... Dime que está bien...¡Dímelo!.

El ojiverde agachó la cabeza.

—El  médico no ha asegurado su total recuperación—habló entonces Liam— Aunque la operación fue muy arriesgada y resultó un éxito, vuestro padre....

—¿Nuestro padre qué?—preguntó ésta acercándose al ojimiel.

—Gemm existen muchas posibilidades de que reaparezca el tumor y la próxima vez puede no tener tanta suerte.

La alfa caminó hacia Harry y rompió a llorar mientras le golpeaba en el pecho descargando su furia.

—¡Eres un estúpido, hermano!...¡si me lo hubieses dicho antes, yo no hubiese llegado tan lejos con Niall!... ¡Maldita sea!, ¡esto es una jodida pesadilla!—gritó desesperada.

El ojiverde levantó su cabeza y miró fijamente a su hermana y luego a su amigo.

—Yo no puedo quedarme. No puedo enfrentar a papá, no se lo merece.

—¿Enfrentarle?, pe-pero ¿por qué?, ¿Qué es lo que has hecho?.

Finalmente, Harry resopló resignado a contar su verdad y aguantar los reproches que seguro vendrían.

—Louis y yo hemos pasado el celo juntos.

26. Vendidos. Larry-Ziam/ Omegaverse (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora