Isaac McBride, su segundo apellido es un secreto hasta para él mismo, su padre nunca quiso revelárselo, a pesar de que se lo pidió incesantes veces.
Isaac es un nombre propio masculino de origen hebreo en su variante en español. Deriva del término original "Yishaq'el" su significado es "Aquel con el que Dios reirá" o "El que hace reír". Cosa bastante curiosa en su vida, porque la creencia en Dios se desvaneció con el suicidio de su padre.
El nombre se lo pusieron por su abuelo, quien llevaba ya años enfermo de Alcehimer y lo primero que repetía cada día al levantarse era "Isaac, cubre el flanco izquierdo", refiriéndose a un viejo compañero suyo de alistamiento militar que murió, desgraciadamente, en ese mismo puesto. Los padres del niño pensaron que esa sería una forma de que, al menos, se acordase del nombre de su nieto. Lo cual no sirvió de nada porque el hombre murió justamente el día antes del nacimiento, pero la ficha ya estaba cubierta y se quedó con ese. Porque a ninguno le dio la gana de pedir que hicieran un nuevo documento.
El chico está bastante conforme con su nombre, le gusta y no ha encontrado a nadie que ponga un mote con él, así que todo correcto. Los motes no le agradan demasiado, ya sean buenos o malos. Hace un gran esfuerzo por no replicar cuando su madre le llama "angelito".
Adoptó el apellido de su madre desde que nació, pues al hombre le daba completamente igual y su progenitora quiso que su único hijo llevase delante su apellido. Datos irrelevantes que no vienen a cuento por el simple hecho de que se trata de un tema del que nunca habla con nadie.
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┏━━━━━━━━━━━━━┓ Edad ┗━━━━━━━━━━━━━┛
¡¿Mental o físicamente?!
Si hablamos de edad física y real, el chico tiene dieciséis años, si hablamos de edad mental... el niño tuvo que comenzar a espabilarse a una temprana edad. Cuando tu madre se vuelve una mujer que trabaja doce horas en un hospital psiquiátrico y tu padre ya no está contigo, aprendes a ingeniártelas por tu cuenta y buscarte la vida como puedes; pues esto mismo le pasó a Isaac cuando a su madre le dieron el trabajo en la otra punta de la ciudad, teniendo que dejar a su hijo de once años solo todo el día, puesto que no tenía hermanos, primos o abuelos con los que pasar el tiempo.
Otro problema es cuando se te da bien esto de aprobar atendiendo en clase y como te pasas el día solo sin tener que estudiar... comienzas a buscar amigos, cualquiera te vale. Y así es como encuentras malas compañías que te hacen abrir los ojos y demostrarte que la vida no es como la infancia llena de arcoíris y rosas.
