ᴡʜʏ ᴅᴏɴ'ᴛ ᴡᴇ ᴛʀʏ?

CAPÍTULO 14

Mis manos comenzaron a sudar nada más ver a Jonah aproximándose a mi, estaba nerviosa pero ni si quiera sabía el porqué, era un estúpido juego de pasarse un hielo, ni que yo sintiese nada por él ni nada por el estilo.

Él puso sus manos sobre mis muslos así transpasando el calor de sus manos a mis piernas, se agachó para poder dejar el hielo sobre mis labios, el hielo era casi inexistente ya, era tan solo una pequeña roquita que terminó de fundir al contacto con mi boca. En el momentó en el que sentí los labios de Jonah contra los mios mi corazón dió un vuelco, ¿qué hacía? Iba a separarme cuando puso sus manos en la parte baja de mi espalda para retenerme, diría que no tuve otra opción pero no es cierto podría haberme separado cuando quisiese, pero no quería, quería seguir sintiendo sus frios labios gracias al hielo.

—¡Uoh!¡El Jonah no se corta con la nueva, eh!—Comentaron todos los de rugby que estaban alrededor, me aparté inmediatamente de él, roja como un tomate le di la espalda.

—¡La tienes en el bote tronco!—Gritó uno de los subnormales de antes.

Él ni se molesto en contestar, simplemente se limitó a rodearme con sus brazos desde mi espalda hasta mi vientre haciendo una pequeña fuerza para sujetarme, apoyó su cabeza en mi hombro pero no tardó en comenzar a besar lentamente mi cuello, allí delante de todo el mundo, cada vez que sus labios rozaban mi piel me daba un pequeño escalofrío que recorría toda mi espalda y no pude evitar echar mi cabeza hacia atrás levemente debido a ello. Inmediatamente di el último sorbo a mi vaso y me volví a verle cogiéndole del cuello de la camisa para volver a juntarle a mi.

××××

Antes de que me quisiese dar cuenta estaba apoyada en la fría ventana del coche de Corbyn con un dolor de cabeza enorme.

—¿Alyssa?¿Estas despierta?—Me dijo Corb casi en un susurro.

—Creo que sí.—Me llevé la mano a la cara para taparla.

—¿Cómo se te ocurre beber tanto? El resto están ya en casa de Jessica. Me quedaré con vosotras.

—Querrás decir con Jessica.—Dije con a penas fuerza.

—¿¡Qué!?¿Qué dices? Definitivamente, estás muy borracha.

—Sí, mucho, pero tu vas por Jessica.—Hice una breve pausa.—¿Jonah no se quedará?

—Vaya, ¿y esa curiosidad así de repente?

—Tu tendrás la lengua muy ocupada, que más te da.—Dije en tono borde.

—Uoh, relájate.

Aparcó y bajó para abrirme la puerta haciendo que mi cabeza que estaba aun apoyada se resbalase con la consecuencia de que yo casi me caiga directa al suelo, de no ser de que me sujetó de mala manera me hubiese hecho un buen chichón.

—¿Alyssa puedes estarte en pie sin tambalearte?—Me sujetó.

—Sí, sí.—Me dispuse a abrir la puerta del coche, la trasera, para coger mi mochila con la ropa, pero la comí pensando que estaba abierta.

—¡Estate quieta!—Me apartó y cogió mis cosas para cargárselas al hombro.

Me apoye sobre él y fuimos hasta la puerta no sin que yo antes tropezase con la escalera. Llamó mientras suspiraba y abrió Noah la puerta.

—¡Dios, como estás!—Dijo intentando aguantar la risa, parecía que ya todos estaban en pijama.

—¡Anda, quita!—La aparté y me hice paso, viendo a todos dentro, sí, los chicos también se quedarían a dormir y no solo Corbyn.

Me dirigí al sofá que estaba más apartado y me tiré en él boca abajo mientras Corbyn me lanzaba la mochila.

—¡Joder, macho eres un puto bruto!—Grité.

—Alyssa, cambiate.—Me dijo Nora mientras se ponía a mi lado dejando a Noah y Zach juntos, demasiaso juntos y Emma observando aun con los ojos rojos.

—¡Estoy cansada!¿No puedo dormir así?—Hice pucheros.

—Levanta.

—¿Eso es un no?—Dije haciendome la dolida.

—Muy bien ya empiezas a pillarlo.—Me dijo Zach desde el otro sofá.

—Bien, ¿dónde esta el baño?—Me levanté pesadamente con la mochila en mi mano, rozando el suelo.

—Pues...—Jessica iba a indicarme pero Jonah se adelantó.

—Te acompaño.

Me encogí de hombros, prefería no pensar en lo que anteriormente había pasado con él. Parece que no era la única que lo recordaba, al parecer el resto algo habían oido porque sus caras eran de todo menos relajadas.