Llegamos antes de lo acordado a casa de Daniel asi que nos sentamos en las escaleras de su porche esperando a que diesen las 6 en punto. Sin poder evitarlo bostecé pero rápidamente tapé mi boca con la mano.
—Tienes sueño.
—¿Tan obvio es?— Froté mis ojos.
—Un poco, aun quedan 15 minutos, duerme.— Dijo con total naturalidad.
—No creo que sea cómodo dormir en el suelo, aguantaré.
En ese mismo instante con ambas manos golpeó sus muslos.
—Apóyate.
—¿Estás seguro?¿No te molesta?— Pregunté no muy convencida, pero sabía que si no descansaba los ojos aunque solo fuesen 5 minutos me moriría.
Asintió y yo coloqué la cabeza sobre sus muslos, olía tan bien ese chico que me dormí al instante en su regazo, como si su perfume se tratase de algún tipo de sedante.
—¿Enserio está dormida?— Preguntó alguien que no lograba identificar, aún estaba en ese pequeño trance que hay entre el sueño y el estar despierto.
—¡No hagas tanto ruido, Jack!— Le ordenó entre susurros.
—Joder con la chiquilla, cuidado, si la molestan se enfada, niña pija.— Masculló en voz baja mientras se alejaba.
Llevé mis manos a mi cara sintiendo la baja temperatura de estas, abrí los ojos inmediatamente al sentir las manos de corbyn acariciando mi cabeza.
—¿Qué, ya estás lista para entrar o nos quedamos un rato más?— Dijo mientras se reía y yo me incorporaba, sin levantarme.
—¿Qué hora es?
—Casi las 6 y media.
—¿¡Por qué no me has despertado!?— Me levanté de golpe.
—Como ya te decía estas mala y estabas demasiado graciosa durmiendo como para arruinar todos los vídeos y fotos que te he hecho.
Iba a llamar al timbre cuando oí "vídeos y fotos". Me giré de golpe, como si de un robot se tratase.
—No me mires así y llama.— Señaló el timbre.
Resoplé y toqué la puerta, esperando con los brazos cruzados y Corbyn justo detrás mia. Para mi sorpresa fue Jack quien nos abrió.
—Anda la niñita de papá se despertó, ¿qué tal ha dormido usted?— Sonrió irónicamente mientras se alejaba por las escaleras dejandonos paso.
×××××××××
Llegamos a la habitación de Daniel donde todos conversaban animadamente, exacto conversaban en pasado porque en cuanto entré la mirada de Jessica se clavó en mi como un auténtico cuchillo. Debería de haber imaginado que si me veía no le haría mucha gracia.
—¡Dormiste como un tronco, eh!— Dijo Daniel riendo, como era habitual en él.
—No me lo recuerdes, por favor.— Rasqué avergonzada mi nuca.
Me senté en el único hueco libre que era justo a los pies de la cama entre Jonah y Jack. En ese preciso instante en el cual Jessica vió que me alejé de Corb ella aprovechó para sentarse en su regazo. Estaba igual de sorprendida que todos al parecer.
—¿Alyssa te presentarás a las pruebas de baile?—Preguntó Emma, que raro.
—¿Qué pruebas?
—Las de las competiciones nacionales. Deberías probar, nosotras también las haremos.— Dijo Nora, señalando a Noah.
—Yo también.— Aclaró Jess.
—No veo porqué no hacerlo entonces, si vais a estar todas.— Sonreí.
—¿Y a la fiesta?¿Irás?— Dijo Jonah posicionando su mano sobre mi muslo.
Alcé las cejas de manera divertida al parecer porque les arranqué absolutamente a todos una sonrisa, incluyendo a Jack.
—Es en casa de Anna una compañera de Daniel y Jack.— Prosiguió al ver que no tenía ni idea de nada.
—¿Fiesta?
Asintieron con la cabeza todos.
—No creo que mi madre me deje.
La cara de Zach fue tan graciosa, debería haber plasmado esta en algún cuadro o algo por el estilo para conservar el recuerdo.
—Dile que vas a dormir conmigo.— Se señaló Zach.
—Desde luego, su madre se calmará al saber que va a dormir con un tio y más contigo.— Parecía que Jess me había leido la mente.
—Pues que diga que dormirá en casa de alguna de vosotras.— Propuso Jack mientras se encogía de hombros.
—¿Te pasa algo?— Quiso saber Daniel.
—¿A quién?— Dijimos Jack y yo al unisono, demasiado extraño.
Daniel señaló al chico que se encontraba justo a mi lado con las piernas pegadas a su pecho. Él abrió los ojos como platos y rápidamente y negó. Pero ellos se entendieron, como si después de esta pequeña reunión fuesen a discutir el tema.
—A mi me parece buena idea, ¿a vosotras?— Dijo Jess.— Podéis venir a mi casa a dormir así no será mentira, mis padres están fuera así que no les molestará para nada.
—Buena idea— Sonrió el rubio a Jessica, ahora más que nunca estaba segura de que estos dos seguían teniendo algo.
—Pues haremos eso entonces.— Informé.
Nora miraba meláncolica a Corbyn cuando este sonrió de aquella manera tan encantadora a Jessica, necesitaba aclarar varias cosas que aun me rondaban por la cabeza.
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ᴡʜʏ ᴅᴏɴ'ᴛ ᴡᴇ ᴛʀʏ?
RomansaAlyssa Adams una joven adolescente de 15 años, se ve obligada a dejar su ciudad natal Seattle y mudarse a Los Ángeles con sus padres. ¿Será fácil para ella empezar de 0? No se permiten copias ni adaptaciones.