¿Noviazgo o Amistad? [#2]

Capítulo Final

Kian❤

¿Dónde estás?
Son casi las una de la madrugada, Kian, ¿dónde carajos te metiste?
Estoy preocupada por ti.

— Ya que te quedarás aquí afuera quien sabe hasta que hora, toma una manta – Catalina se acerca y me tiende una manta, le agradezco con una sonrisa. — ¿Segura que no quieres compañía?

— No, vayan a descansar...

Eras las doce con cuarenta y tres minutos de la madrugada y el señor Kian no se digna a aparecer. Gracias a nuestra discusión, la noche de películas no se dio; solo fue una noche de llamadas y mensajes que le dábamos a él pero que fueron ignoradas. 

No sabría explicar como me siento ahora mismo, no entiendo nada de lo que está pasando. No entiendo a Kian, no me entiendo a mi.

Lo que sí entendía es que ambos somos unos bipolares de mierda... Hace unas horas cuando llegamos estábamos súper bien ¿y ahora? Él salió de la casa sin decirnos a donde iba y éstas son horas en las que no sabemos dónde y cómo está.

— ¿Qué hacen? – pregunto al ver a mis amigos acomodarse en el frente con mantas y almohadas.

— Nos dijiste que vayamos a descansar, pero no dijiste en donde – me responde Ryan – Así que lo haremos aquí afuera

— Contigo – termina Alexis sentándose a mi lado – Vamos a esperar al dramático de Kian

— Aunque sea durmiendo pero no estarás sola – dice Annie.

— Gracias

Terminaron de ubicarse en el piso, unos al lados de los otros, yo era la única que estaba sentada en el pequeño mueble que había allí.

Supongo que pasaremos la noche aquí – pensé mientras rodeaba mi cuerpo con la manta que me había dado Catalina.

1:57 marcaba la pantalla de mi celular, no había pegado un solo ojo en todo este rato. Estaba muerta del sueño y Kian nada de aparecer.

Si antes estaba preocupada, ahora no sabía como estaba. Iban a ser cinco horas desde que Kian salió sin decirnos nada...

Kian❤

¿Dónde estás?
Al menos dime si estas bien

Le escribí rezando por milésima vez que me respondería o que al menos los viera. Le rezaba a todos los dioses para que él estuviera bien, me moriría si algo le pasaba.

— ¿Aún no llega? – me asusto al escuchar la voz de Ryan.

— No, ¿Y si le pasó algo? Tal vez por eso no responde

— Ni siquiera lo pienses – se levanta y se sienta a mi lado – Él está bien – pasa su brazo por mi hombro abrazándome y dejando un beso en mi frente – ¿Por qué no duermes un rato?

— No puedo

Nos quedamos un buen rato en silencio hasta que por fin vimos un auto acercarse a la entrada.

— ¿Ya llegó? – Alexis pregunta adormilado.

Nadie responde nada, me pongo de pie esperando que Kian baje del auto. Cuando lo hace, camina como si nada hacia donde estábamos. Los demás se dan cuenta y comienzan a despertarse.