Através Del Espejo ◆YOONMIN◆

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La alarma de su celular sonó, y no recordó un día en que despertar fuera lo mejor del mundo. Jimin se incorporó rápidamente con una gran sonrisa surcando su rostro, se arregló lo más rápido que pudo, estaba seguro de que ese día por fin sería diferente.

—Noona, besé a hyung. — Jimin hablaba por teléfono con su psicóloga.

—¿En serio Jimin ssi? — Sonaba muy emocionada.

—Si noona, estoy muy feliz — Después de que Yoongi y sus hyungs se fueron, lo primero que hizo Park fue llamar a Suran.

—Eso está muy bien Jiminie — Pensó muy bien lo que diría después. —¿Te gusta tu hyung?

Jimin se sentía aun confundido por sus sentimientos, pero no había duda de que sentía algo por Yoongi, algo más que una amistad.

—Si — Admitió, ¿estaba mal? No, encontrar a una persona que lo quiera no estaba mal, además él ya no lo veía como un simple hyung.

—¿Tú le gustas? — No había duda de eso, él se lo había dicho y le creía.

—Si. — No había nada más que aclarar, sus sentimientos eran recíprocos.

Por esa y por más razones estaba Jimin esperando a alguien, una persona con la cual debía hablar antes de poder iniciar algo con Yoongi. Park estaba nervioso, las manos le sudaban y se sentía un tanto inseguro, pero estaba completamente decidido a cerrar por completo ese capítulo en su vida.

⏳

Jimin llegó temprano al instituto, estaba nervioso, pero poco lo importó, respiró hondo y se repitió mil veces lo que le diría al chico una vez que lo tuviera frente a él.

Cuando vio que la mata rubia se acercaba poco a poco a la entrada de la escuela sus nervios aumentaron en gran medida, pero no echó su decisión por la borda. Una vez que estuvo lo suficientemente cerca tragó saliva y se dirigió hasta él.

—Taehyung — Llamó, el chico de cabello rubio y piel morena se volvió hacia él. —¿Podemos hablar?

Él recordaba que Park quería hablar con él desde tiempo atrás, más nunca le dijo nada, hasta ese día. Él asintió con la cabeza. El pelirrosado lo guio hasta el patio de la escuela, que, a esas horas se encontraba vacío.

—¿En qué puedo ayudarte Jimin ssi? — Taehyung centró su total atención al chico frente a él.

—Yo–Yo lo siento. — Eso tomó por sorpresa a Kim, ¿Por qué le decía eso? ¿A qué se debía?, ¿qué dices Jimin? Pensó.

—¿Y eso por qué? — Fue su respuesta inmediata.

Jimin sintió un poco de vergüenza, tal vez debió de tener un poco más de tacto.

—Cuando tu fuiste a verme a mi casa ese día y me diste aquel consejo yo de verdad fui un idiota — Comenzó. —Tenías razón, yo no había superado a Jungkook y me aferraba a él, cegándome por completo. — Se sentó en el suelo del patio y Kim imitó su acción. —Yo quería creer que él iba a regresar, que volvería a ser todo como antes, pero no quería darme cuenta de que ya todo había acabado y que él estaba siguiendo con su vida mientras yo me estancaba — Bajó la mirada. —Te odié por mucho tiempo, pero, después me di cuenta de que si alguien quisiera romper la relación que yo tengo con la persona que me gusta también haría lo mismo que tú, me estaba entrometiendo en su relación. —Suspiró. —En verdad lo siento.

Taehyung estaba petrificado, ¿era verdad lo que escuchaba? ¿por qué Jimin era quién se disculpaba? Eso solo rompió el corazón del rubio.

—Yo también lo siento. — Trataba de no sonar tan sorprendido. —La verdad es que yo tampoco lo hice mejor, te traté como mierda cuando tampoco supe lo que estabas sintiendo. — Confesó. —No merecías ese trato, no eres culpable de nada.