Através Del Espejo ◆YOONMIN◆

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Yoongi despertó, como no había estado yendo al instituto podía dormir más de lo normal, pero tampoco le gustaba mucho pues con las pastillas que le estaba dando su hermano todo el día estaba dormido.

No había tenido sueños en esos días y le urgía volver a la escuela, suponía que los trabajos y tareas se le estaban acumulando y obviamente no quería hacer todo de una sola vez.

Seokjin no le había dicho nada acerca de lo que el neurólogo dijo, pues argumentó que todo seguía igual, pero esas palabras, lejos de relajarlo solo lo preocuparon más. ¿Por qué nada había cambiado? ¿Había malo con él? Suspiró con fuerza, también había notado que Hoseok estaba raro, casi no hablaba y parecía nervioso la mayoría del tiempo y es precisamente por eso que quería hablar con sus amigos nuevamente, además de que no había visto a Jimin en un buen rato.

—Yoon, bebé — Su hermano entró a la pieza del menor —Es hora de tus medicinas.

—No quiero Jin, no hoy — Pidió.

—Sabes que es necesario — Acarició su cabello —Por tu bien.

—Por favor — Susurró, Seokjin suspiró y accedió, tal vez era bueno que estuviera despierto por un rato.

—¿Cómo te sientes? — Se sentó frente a él.

—Bien, el dolor ha disminuido — Llevó ambas manos a sus ojos para tratar de aclarar su visión —No he tenido sueños.

—Eso es bueno — Asintió —Si todo mejora volverás a la escuela el Lunes.

—Pero ya me siento mejor — Odiaba mantenerse sin hacer nada por mucho tiempo, quería distraerse para olvidar un poco su situación.

—Es mejor que descanses — No le diría que tenía una enfermedad grave y que era mejor mantenerlo aislado del resto, así que antes de que pudiera comenzar a llorar salió de la habitación y volvió a la suya. Ahí pudo llorar con total libertad, se sentía tan vulnerable de esa manera, tan patético, tan cobarde; se deslizó por su pared quedando sentado en el frío suelo de su pieza, todo parecía hacerse tan grande y él tan pequeño que sabía que si seguía mintiendo de la forma en la que lo hacía sería un grave problema y, paulatinamente, imposible de controlar. —Perdóname — Le dijo a la nada, pegó sus rodillas contra su pecho y escondió su rostro, para que nadie viera la miseria que era en ese momento.

⏳

Hoseok debía continuar con su vida normal, asistir a clases y no retrasarse con sus tareas, pero comenzaba a ser difícil fingir que no pasaba nada al punto de sentirse como en Daegu, tan asfixiado.

—Hola Hobi — Saludó Jungkook en cuanto lo vio entrar, Jung le dirigió la mirada y se encontró con la de Kim, quien parecía perforarle el alma, tuvo que romper contacto visual con el ahora pelinegro.

—Buenos días chicos — Trató de sonreír, sin embargo, solo salió una mueca en su lugar.

—¿Cómo te sientes? — Jeon y Taehyung habían acordado estar más al pendiente de Hoseok. Cuando Jungkook se enteró de lo que ocurrió el día anterior algo se inquietó dentro de él, pero decidió que sería mejor reservarse su preocupación hasta que pudiera saber a ciencia cierta qué ocurría.

—¿P–Por qué me preguntas eso? — Pánico de nuevo —Me siento bien, estoy bien — Su corazón comenzó a latir muy rápido, pero debía controlarse.

—Hola — Una cuarta voz interrumpió, alejando la tensión entre los amigos.

—Hola Jimin ah — Saludó Kim.

—¿Saben? Estuve pensando — El pelirrosa dejó sus cosas en su banca y después se volvió a sus amigos —Vamos a ver a Yoongi.

Todos se sorprendieron ante la petición de Park, pero nadie se negó; tal vez sería buena idea ir a ver a su amigo, mostrar que estaban con él y que lo apoyaban, eso hacían los amigos.