Parte 1

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Sonic miraba desde una pequeña rendija donde entraba la luz de afuera. Aquella era una ventana, pero estaba cubierta con tablas de madera, de no ser que estubieran bién parejas, este niño no hubiera conocido aunque sea una parte del exterior, aunque sea solo lo que la rendija le dejaba ver. Miraba como unos niños de su misma edad jugaban y sonreían en la vereda, sintiendose libres. 

Nadie devía saber su existencia, es lo que siempre sus "padres" le decían, inclusive hasta pocas veces le prestaban atención, solo para decirle que él era el peor error que habían cometido, pero no solo ellos, sino también los familiares del pequeño. ¿Pero qué había hecho el pequeño para merecer eso? Nisiquiera él lo sabía. Al pequeño solo le interesaba qué había en el exterior de su "habitación" ya que solo esta conformaba solo de un colchón viejo y sucio, unos cuantos trapos que él usaba para cubrirse del frio y un pequeño bater para que ahí hiciera sus necesidades. De ese lugar era su propio mundo, no conocía nada mas y la única persona que le visitaba casi a diario era esa mujer que le llamaba madre, aunque a ella le hubiera gustado que se lo dijera un niño de verdad. Ella solo lo miraba con desprecio, y como si tuviera la paranoia que se le contajiase la extrañeza del niño tiraba el plato de comida quedando solo una pequeña parte de esta en su sitio. Al hacer esto, con un pequeño trote se aleja de esa habitación y antes que saliera escuchó un lastímero "gracias" de parte del niño. De todos modos él ya estaba acostumbrado a esto. Como pudo comió todo lo que había dejado, incluyendo lo que estaba tirado en el piso. Tenía hambre. Al terminar pasó el plato debajo de la puerta y volvió al lugar donde todas las mañanas miraba, para saber que afuera había un lugar que explorar.


Tenía que llorar en silencio. Los golpes que le proporcionaba su padre con un látigo de fierro chamuscado, había hecho que mas heridas aparecieran. Él solo quería ver lo que había mas allá de su puerta, pero esta vez lo habían atrapado y no había lugar para esconderse. A pesar de que estaba en el lugar mas oscuro de la casa se podía escuchar claramente los sonidos que hacía el niño, asi que tenía que callarse o sino él terminaría mas lastimado de lo que ya estaba.

Shadonic: Dolor eternoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora