Never mind

2,

CapÍtulo 2,

-¡Tienes que venir! - me chilló al oído mi amiga Marie. Ella es francesa, y está obsesionada con un grupo musical inglés. Si, como no, One Direction. Nunca lo entendí. Sí, es una estupidez negar que son guapos, pero su música no llega a convencerme, es simplemente que la puedo escuchar, pero no tengo las ganas de hacerlo constantemente, como las tiene ella.

-¿Por qué? ¿En qué me beneficia eso a mí? - comencé a reirme a carcajadas. Mis dos amigas, Marie y Alexandra estaban empeñadas en que fuera con ellas a una firma de autógrafos que hacían en el centro comercial. 

-Te compraremos el disco de la tienda que quieras - murmuró Alex. Levanté la mirada, sabían lo que significaba eso. Me tendrían que comprar el último disco de Kings of Leon. No estaba precisamente regalado.

-¿Seríais capaces de hacerlo? - me carcajeé. Si eran capaces de hacerlo les importaba de verdad mi compañía. Ambas asintieron. Sonreí - os acompañaré. Pero no quiero que me compréis nada, sería soborno - chillaron y aplaudieron contentas. Parecían locas.

Dos días después nos dirigimos en el coche de la madre de Alex, Maggie, hasta el centro comercial. Ellas iban vestidas con camisetas de One Direction, y shorts. Yo sin embargo, llevaba una camiseta de nirvana, shorts y unas vans amarillas. Del color del logo del grupo musical. Mis amigas me miraban con una cara que denotaba lo que ellas llamaban "traición".

-Te regalamos una camiseta, ¿Por qué nos haces esto? - se notaba que no le había gustado mucho la ropa que llevaba ese día.

-Suponía que no os gustaría, por eso hice esto - abrí mi mochila de cuero y saqué un trozo de la camiseta de 1D que me habían dado.

-¡La has matado! - gritó Marie, con su adorable acento.

-No la he matado, he hecho una bandana. Me la pondré cuando entremos en aquel lugar lleno de locas fans y me lo quitaré al salir - ellas resoplaron a la vez. Me hacía gracia la situación. 

-Por fin vamos a conocer a ONE DIRECTION!  - gritaban las dos. Yo no podía evitar sonreirles.

- ¿A qué hora empieza la firma? - pregunté una vez bajamos del coche.

-A las ocho - replicó Marie. Me miró, esperando mi reacción.

-Cariño, ¿me estás diciendo que llegamos seis horas antes de que empiece la firma? - me quedé parada.

-Mmmm, sí - Suspiré. A pesar de que las quería como hermanas no podía evitar pensar lo crueles que eran conmigo.

 - Broo, no te preocupes - Alex se encogió de hombros  - tu vete a dar una vuelta, y cuando te canses ven con nosotras, que esperaremos aquí, para ser de las primeras y sacarnos unas fotos con ellos - continuó con una sonrisita en la cara.

-De acuerdo, ¿no os importa? - negaron con la cabeza. Ah, claro. La que iba sola era yo. Las acompañé hasta la tienda de discos y me asombré. Ya había mucha gente. Demasiada. Todas chicas soltando grititos de emoción. Murmuré una despedida y me alejé de allí. ¡Por dios, que caos!

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Holaa! Esta es mi primera historia FF! 

Espero que os guste, y si es así votad y comentaaaaad!

Muchos beeesos!