Never mind

5,

Aquí va la parte cinco! Decidme si os gusta! y muchas gracias por leer! 

<3

-------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Tras presentarles a los chicos y explicarles por qué se encontraban aquí, ambas me cogieron de la mano y me obligaron a subir a mi cuarto. Me sentaron sobre la cama y se me quedaron mirando fijamente. Supuse que esperando una explicación.

-Mmmm - murmuré - ¿Sorpresa? - les sonreí timidamente desde mi colchón. Levanté un poco las cejas en señal de disculpa, e intenté poner mirada de cachorrito.

-¿Sorpresa? ¡¿SORPRESA?! - me chilló Alex - Es increíble que seas prima de Zayn, uno de los tío más sexys del mundo...

-¿Estáis enfadadas por no haberoslo contado? - la interrumpí.

-¿Pero qué dices? - Marie se sentó a mi lado. 

-Por supuesto que no estamos enfadadas - contestó Alex sentándose a mi otro lado - es más, estamos emocionadas. ¡Cenaremos con One Direction!

-Me alegro de que no os lo toméis mal... - les mostré mis dientes, contenta.

-Pero, aún así... ¿Por qué no nos lo contaste? - Alex se levantó y me miró fijamente. Alcé mis ojos para encontrarme con sus hermosos ojos color miel.

-Bueno... en realidad...Es que... - no era capaz de contárselo. Sencillamente las palabras no salían.

                                                                             ····FLASHBACK·····

-¡ZAYN! - chillé - ¡NO SE DEBE HACER ESPERAR A UNA DAMA! - llevaba exactamente quince minutos esperándole. Después de que él mismo me dijera que las iba a pagar muy caras como le hiciese esperar.

-Ya estoy - replicó bajando por las escaleras - ¿desde cuándo tú eres una dama? - bufé.

-No te olvides de que aquí la persona importante soy yo. Que por algo es mi 15 cumpleaños.

-Cierto, aún eres una niña - me revolvió el pelo. 

-Quita tus manos de mi pelo , maleducado - le empujé con ambos brazos. Pronto él se iría a hacer una prueba para ese estúpido programa de televisión, y él esperaba conseguir algo de fama. Yo sabía que él cambiaría después de eso. No podía negar que cantaba muy bien, y con el estilo adecuado sería un gran ídolo adolescente. Y no me equivocaba.

Esa noche era una de las últimas que le vería en los próximos dos años. Pero yo eso aún no podía saberlo. Así que disfrutaba de la compañía de mi primo favorito en un restaurante cercano a mi casa en Bradford. Ésa era nuestra noche. El día de mi cumpleaños él siempre me invitaba a cenar en ese pequeño restaurante. Desde que tenía doce años lo había hecho, y ya era tradición. Por lo demás, ya celebraría mi cumpleaños con mis amigos otro día.

Habíamos ido caminando, como de costumbre. Pero esta vez notaba que algo había cambiado. 

-Zayn, ¿está todo bien? - le pregunté dándole un ligero empujoncito en el brazo.

-¿Eh? - bajó su mirada a mis ojos - Claro... sí - Lo supe en ese instante. Había sucedido. Habían encontrado a mi padre.

-¿Zayn? - le agarré de la chaqueta - Escúpelo. Ya no soy una niña.

-Brooke, verás... Es mejor que te lo diga tía Martha cuando llegues a casa - me pasó un brazo por los hombros y me acercó a él - vayamos a cenar.