Enamorándome

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Esa noche la pasé de maravilla. Les dejé a mis padres la pizza en la sala, de inmediato salieron a comerla junto con Kevin y Karen. Yo, en cambio me encerré en mi habitación.

Me tiré a la cama y grité de la dicha. ¡Lo que había vivido hoy con Kyle había sido único! Fue de ensueño. Quería tenerlo aún durmiendo en mi hombro.

La felicidad fue interrumpida por Damien, que volvió a su forma original con algo de molestia.

–Hey, gracias por notar mi existencia.

–Oh, Damien, disculpa, había olvidado-

–Si me di cuenta, estabas pensando solo en Kyle... Ja! Bromeo. Te felicito amigo, vas de Casanova con el judío eh?

–Y que lo digas. Awwn, fue lo más hermoso que me haya pasado hoy, te lo juro.

–Creo haber visto desde tu hombro la cara de idiota que traías. Estás enamorado enserio.

–Lo sé... ¿Sabes qué? Mañana que iremos a hacer el proyecto, le llevaré algo, e intentaré quedarme hasta tarde con él.

–Me alegro mucho. Kenny, disculpa amigo, quiero dormir.

–Yo también viejo, yo también... Buenas noches Damien.

–Buenas noches Kenny.

Me recosté en mi cama y cerré mis ojos. Tal era mi cansancio que caí en un sueño profundo, el cual no pude evitar.

Cuando volví a abrir mis ojos ya era de mañana. Tenía que alistarme para volver a la escuela.

Sin hacer mucho ruido me levanté de la cama, preparé mi desayuno e hice una pequeña rutina de ejercicios. Finalmente comí, cepillé mis dientes y tomé rumbo a la escuela.

Frente a mi casa, y como era de costumbre ahora, estaba Tweek, esperando a que saliera. Obviamente fui con él, y claro, con Damien sobre mi hombro.

–H-hola Kenny, l-listo?

–Claro viejo. Vamos... Que tal el día de ayer?

Emprendimos el camino hacia la escuela, obviamente con una pequeña conversación para pasar el rato, después de todo, no había nada más que hacer.

–P-pues... A-aburrido. N-no hicimos mucho. ¿A-a donde fuiste? Me q-quede esperándote a-a la salida.

–Oh, disculpa, tuve que atender ciertos asuntos. ¿Aparte, pasó algo con ya sabemos quien?

–A-ayer estuvimos hablando, d-dijo que lo mejor era alejarnos...

–Tiene que ser una broma. ¿Que le dijiste?

–L-le dije que quería estar con él, p-pero dijo q-que era lo mejor p-para los dos.

–Dios mío... Mira, hace poco hablé con él, está muy indeciso con esto. Pero, creo que si tú logras demostrarle que lo harías feliz, el aceptaría esto.

–¿E-enserio? S-si es así, e-entonces...

–Has un buen esfuerzo viejo.

Le di un espaldarazo a Tweek, quien se veía sumamente animado y determinado, realmente quería a Craig. Lo dejé a su suerte, siendo él quien pondría las cosas en marcha. Yo, en cambio, seguí directo hacia mi salón, donde curiosamente solo había una persona, Kyle.

–Umm, hola Kyle. ¿Donde están los demás?

–¡Hola, Ken'!  Oh, había olvidado decirte. Hoy los de los grados superiores tenemos el día libre.

Final InesperadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora