El sacrificio por amor

400 45 22
                                    

Un gran impacto rompió el silencio de South Park, un impacto más fuerte que un rayo se originó en el observatorio abandonado de la ciudad.

Kyle Broflovski vio frente a sus ojos su muerte, pero en fracciones de segundo, fue otro quien terminó dándole adiós a su existencia.

Al final la historia diría que Kenneth McCormick se atravesó frente al ataque de Gregory, recibiendo la puñalada en su corazón, dandole la última estocada a su existencia.

Kenny, como persona, murió en ese instante, pero su alma y su determinación se fundieron con aquel ente oscuro que vivía en su subconsciente. La maldición finalmente se apoderó de todo: un alma humana, y un cuerpo muerto.

Ese, fue el fin de Gregory, aquél ángel que decidió traicionar sus principios y a su gente a cambio de un bien personal, el cual ya no podría disfrutar.

–Maldito, ¿Porqué no mueres? —Gritó Gregory entre el desespero y el nerviosismo.

–Gre-go-ry —Articuló la maldición en el cuerpo de Kenny.

–N-no, ¡apartate!

–Gre-go-ry —Repitió el ser, dando pasos lentos hacia el aterrorizado ángel.

–A-ahhhh, a-alejate de mí, ¡aléjate!

–Gregory. —Finalizó el ser, mirando al miserable ángel fríamente con sus ojos teñidos de un rojo brillante, uno  que parecía sangre.— Te voy a matar.

–¡N-no!

Gregory se lanzó al ataque, intentó apuñalar nuevamente a ese demonio que tenía frente a él, no pasó nada. Después desenfundó su espada, intentando dar un fin a la pelea, tampoco ocurrió nada. Parecía que cada intento que hacía no ejercía ningún efecto, su destino estaba sellado.

Sin hacer esfuerzo alguno, el ser tomó a Gregory de su cabeza en un momento de tensión, y con los fallidos intentos de este por liberarse, lo aplastó agresivamente contra el suelo, rompiendo su cráneo y acabando con su vida.

–¿Te gusta, no es así? —Respondió la criatura, con una voz similar a la de Kenny, pero con un eco infernal y un tono más grave.

El ser se descontroló. Lanzo una infinidad de ataques al cadaver de Gregory, quería destrozar hasta el último centímetro de su cuerpo. Poco a poco era menos lo que quedaba de aquel ser. No contento con esto, empezó a lanzar varias rafagas de fuego, el cadáver ya ni siquiera parecía haber sido una persona antes, no solo estaba destruido totalmente, también se había calcinado.

El desespero se apoderó de esa criatura, qué, con un grito desgarrador, extendió unas alas de plumas negras desde su espalda, y bajo el brillo de tres triangulos a su alrededor se posó en el cielo de South Park.

Pip se encontraba aterrado, aquello que intentaba terminar, estaba retornando, se había apoderado del cuerpo de Kenny, pero no totalmente. El ángel lo pensó, talvez había algo de Kenny allí, después de todo, la maldición todavía no poseía el 100% de ese cuerpo, es más, se veía con una actitud aún racional, sólo bastaba con llamar a Kenny,  hacer que tomara el control para revertir la situación y así darle un fin a todo.

Kyle entonces estaba desmayado, la situación fue demasiado para su frágil espíritu. Para evitar que resultara lastimado, Pip tuvo que alejarlo un poco del campo, también aprovecharía para despertarlo y convencerlo de que hacer. El ángel lo llevo en brazos hasta una zona boscosa donde no los verían.

Una vez ya estaban en un lugar seguro, Pip intentó despertar a Kyle, éste, poco a poco, retomó la conciencia.

–Kyle, kyle, despierta

Final InesperadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora