mírame ;; axel blaze.

Cap. 15: ¿Qué te pasa, Xavier?

Era de día, no sabía nada más. 

En las últimas horas había dormido de maravilla. Tenía las mejillas un tanto rosadas y me costaba abrir del todo los ojos, sin ir más lejos. En cambio Axel, que estaba a mi lado tenía sus mejillas el doble de rojas, algo disimuladas por el moreno de su piel. Dormía aún con la boca entreabierta, soltando de vez en cuando suspiros cansados. 

Las sábanas me tapaban el pecho, que se encontraba a la altura de su abdomen. Había dormido con la cabeza sobre su pecho, y tan bien que había dormido. Estuve un rato acariciando su torso con cuidado, hasta que me fui sintiendo más y más somnolienta. Pero entonces una de sus manos empezó a acariciarme el pelo y el cuello. Después mi mejilla. Después volvió a bajar a mi clavícula. Me encontré sobre su pecho de nuevo con los ojos cerrados, pensando que dormirme sería una buena opción. Creí no haberme sentido nunca tan bien. 

-Veo que has dormido bastante bien.-susurró. 

Me reí para mis adentros, traduciéndose en un resoplido muy débil y una sonrisa. Apoyé mis manos sobre su torso y sin hacer apenas fuerza me incorporé, para después deslizarme hasta sus labios. 

-Buenos días.-susurré.

-Buenos días. 

Se rió, y todavía besándome me hizo girar hasta dejarme tumbada, y se puso encima de nuevo.

-Creo que tenemos que ir a entrenar.

-Ahora mismo nos vendría bien una ducha. 

-Sería muy cantoso.-dije riendo.

-Supongo.-suspiró.

Giró para quedar de nuevo tumbado, pero a mi lado, sin arrastrarme con él. Se sentó y estiró, bostezando. 

-Oye, para mí da igual, pero, ¿tú has dormido bien?

Soltó una pequeña risita. 

-De maravilla. 

-¿Dónde estábais?.-preguntó Xavier.

-Desayunando.

-Cambiándonos.

-Desayunando y cambiándonos.

-Cambiándonos y desayunando.

Miré a Axel un tanto amenazante. Este no estaba seguro de cómo reaccionar a mi mirada, pero en el fondo sabía de sobra que tampoco tendría una reacción violenta. El problema ahora era hasta qué punto podríamos convencer a Xavier de que no habíamos... bueno, hecho lo que habíamos hecho. 

-Ren, me estás asustando. 

-Estábamos desayunando y cambiándonos. Nos levantamos un poco antes y... bueno, preferimos levantarnos nosotros solos y empezar un poco antes el día. 

-Sí, bien...-empezó Jordan desde las espaldas de Xavier.- ¿Y a las cuatro de la mañana no pensásteis que a lo mejor dormir un poco más era conveniente?

-Perdona, ¿qué?.-preguntó Axel un tanto nervioso.

-Duermo a ratos, tío. Me duermo ahora y al rato me despierto, me pasa siempre que no hago ningún esfuerzo excesivo, y estuve en la Alius, así que los esfuerzos excesivos ya no son. A las cuatro de la mañana me desperté y miré el reloj en el móvil. Me levanté porque quería ir al baño y encontré vuestros sacos vacíos. 

Axel respiró hondo. Miró a Xavier y buscó palabras. Pero si todavía no habíamos terminado de acostumbrarnos del todo a que la gente hablara como si nada de que éramos pareja, contar algo así en voz alta delante de más de una persona no era fácil. Me vinieron de pronto las palabras a la cabeza.