18 | «DRACO»

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—Qué—exclamé roja de la vergüenza —. ¡No digas eso! —grité a la vez que me tapaba con las sabanas.

Él sólo rió escandalosamente.

—Hey, Lily... No te pongas así... —dijo entrecortado por la risa—, sólo era una broma.

Me destape un poco la cara, lo suficiente para verlo.

—Aunque, la verdad, no suena para nada mal... —agregó.

—Damian—chillé, y me tapé nuevamente.

Todo quedó en silencio por unos momentos.

—Oye, bonita... —me susurró intentando destaparme la cara—, si te quedas así no no podré ver tu linda cara...

No dije nada, púes me mordía el labio aguantando las ganas de hacer lo que me pedía, darle un beso... De seguro tenía las mejillas más rojas ahora.

—Bueeno... Plan B—dijo, y seguido empezó a hacerme cosquillas.

Reímos juntos a la vez que intentaba patearlo porque si seguía haciéndome cosquillas me haría encima... ¿Qué? ¿Nunca les ha pasado?

En un momento dado y no sé cómo—pues tenía los ojos cerrados de tanto reír—, mis brazos rodearon su cuello y sus manos abrazaron mi cintura.

Abrí lentamente lo ojos cuando noté que ya no me hacia cosquillas, y que estaba muy callado.

—¿Damian? —pregunté sin abrir los ojos del todo.

Su cabello azabache cubría parte de su ojo derecho, siendo el derecho que me conducía a sumergirme en un pozo de color azul. Mi mirada bajo hasta sus labios, apretados en una fina linea rosada. El también miraba mis labios y parecía aguantarse las ganas de besarme, lo cual me hizo sonrojar.

Me miró a los ojos, y por un momento me avergonzó tenerlos de un común cafe, aunque eso cambió cuando lo escuché a él...

—Tienes... Tienes unos bonitos ojos—me dijo, con las mejillas rojas.

—¿E–enserio?

Me iba a responder cuando la puerta se abrió, y un rubio entro a la habitación sin darse cuenta de nosotros.

—¡Damian, tienes que ayudarme, es Pansy otra vez! —exclamó, para luego darse cuenta de la posición en la que estábamos yo y Damian—... Oh... Lo siento, no sabía que ustedes dos... Aquí... Ya saben... —balbuceó.

—A no... Esto... Estábamos... —dijo Damian, sin ninguno soltarse aún.

—A punto de...

—Besarnos... —terminó él.

Solté una risa nerviosa.

Parecía más irreal decirlo en voz alta. ¿Acaso me gustaba mi mejor amigo?

—Ah... Bueno, si quieren pueden seguir, yo no miraré, sólo es que... Pansy quiere estar conmigo y púes... Yo no, entonces... —Draco rió también, haciendo que todos riamos, aliviados y con gracia.

Un troll unió a Harry, Hermione y Ron, pues Pansy unió a
Lily, Damian y Draco.

Una Granger diferente  [UGD#1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora