CARTAS AL PASADO

Corazones rotos

Le dijo a Adam que llevaría un vestido verde para que él pudiera identificarla, se maquilló un poco, y peinó su cabello de la forma más linda que encontró, su hermana se ofreció a llevarla a la estación de tren, ya que se le había hecho un poco tarde, quería verse perfecta para Adam que se le pasó el tiempo volando, antes de salir de casa, tomó su chaqueta negra y una bolsa de regalo que contenía un reloj masculino de buena calidad, lo compró con sus ahorros.

Kika la dejo en el tren, trató de disimular su emoción, para quien la viera nadie pensaría que estaba apunto de encontrarse con un chico, pero en el interior era un mar de emociones.

Llegó a buena hora a la plaza, quería ver a Adam ya, estaba a tan solo poca distancia de el, salió de la estación del tren y empezó a buscar con la mirada, con una sonrisa que no cabía en la felicidad que sentía en ese momento, miró su reloj eran la una con diez, era buena hora, Adam estaba un poco retrasado, camino un poco por el lugar, sin dejarlo de buscar, pero nada

Eran ya las dos de la tarde, se sentía angustiada, Adam no aparecía por ningún lugar y eso le preocupaba. ¿Qué tal si se había arrepiento de ir? ¿Y si había llegado pero al verla decidió que finalmente no quería hablarle? Miles de preguntas se generaron en la mente de Daisy.

Otra hora había pasado, y seguía en las mismas, fue a la tienda más cercana a comprar un refresco, se sentó en una banca que quedaba en medio de la plaza y espero, esperaría un poco más de tiempo, su mente y corazón albergaban la esperanza de que el llegara.

Pero no lo hizo, una fuerte lluvia comenzó a caer sobre ella, viéndose obligada a abonar el lugar, corrió hasta la estación, donde antes de romper en llanto le busco una vez más con la mirada, tomó el tren de regreso a casa, sin dejar de llorar.

Camino bajo la tormenta, sin importar nada, al entrar a casa solo estaba Kika, quien al mirarla corrió a abrazarla sin importar que estuviera escurriendo agua.

-¿Qué pasó?- preguntó muy preocupada.

-No llegó.- dijo Daisy entre lágrimas y un susurró apenas perceptible.

Su hermana con una mirada de tristeza la dirigió al baño, tomo una ducha con ella, la llevó a la cama, Daisy le pido que se quedará, ella se recostó a su lado y la abrazo fuerte.

Daisy no dejaba de llorar su corazón se había roto, él la había dejado plantada, en el día que sería especial para ambos, lloraba y se aferraba a los brazos de su hermana tanto como podía.

Se quedó dormida entre llantos, con la mínima esperanza de que él le escribiera diciendo porque no llegó, pero la carta jamás llegó, los días se hicieron semanas, las semanas meses, y Daisy ya un poco más recuperada le escribió, queriendo saber porque no apareció y si todo estaba bien.

Su corazón terminó de romperse al saber que su carta fue devuelta porque Adam ya no vivía en aquel lugar, y así los meses se hicieron años...

Aquí la actualización, espero les guste y se queden más intrigados jajajajaja
Nos vemos pronto cuidense besos